Las autoescuelas onubenses han aumentado en los últimos meses sus matrículas entre un diez y un 15 por ciento, no obstante no es una cuestión que el sector note demasiado, ya que desde 2008, en el comienzo de la crisis, éstas han descendido alrededor de un 60 por ciento, teniendo en cuenta además que los precios actuales, "a veces, están por debajo de los costes".
En declaraciones a Europa Press, el presidente de la Asociación de Autoescuelas de Huelva, Francisco Bravo, ha remarcado que la situación "sigue regular" porque, a pesar de este leve aumento, los precios, ha insistido "están, a veces, por debajo de los costes", a la par que ha lamentado que "no pueden subir porque el estado general de la sociedad es mala y más en Huelva con tanto paro, sobre todo el juvenil".
En la actualidad, de media y aprobando a la primera, "el precio de un carné suele alcanzar los 600 euros, pero en 2008 costaba casi el doble", no obstante, asegura que "la prioridad y las ganas de los jóvenes para obtenerlo siguen siendo las mismas, pero el poder adquisitivo es menor".
En cuanto al profesorado, el presidente de la asociación ha asegurado que "no se han dado tantos despidos en los últimos años ya que cuando comenzó la crisis, el propio dueño de la autoescuelas hace de profesor".
Al respecto, ha criticado "las trabas y las imposibilidades" existentes debido a la falta de funcionarios en Tráfico, sobre todo durante el verano, donde están "casi en precario", lo que provoca "un descenso de exámenes", a lo que ha añadido que "solo se preocupan de cubrir el expediente, lo intentan hacer lo mejor posible pero no llegan a cumplir las necesidades".
Preguntado por el cierre de este tipo de negocio, Bravo ha señalado que "aunque no han desaparecido muchos nombres de autoescuelas, sí algunas secciones", aunque reconoce que es "muy difícil llevar un control". En otros casos no ha desaparecido el nombre de la autoescuela pero cada sección ha pasado a pertenecer a un dueño distinto.
Por último, el presidente de la asociación ha precisado que aunque el sector "no fue uno de los afectados directamente por la crisis porque había un gran remanente de alumnos, va a ser uno de los últimos en salir de la misma porque el permiso de conducir, para muchos sectores, no está considerado de primera necesidad y los ciudadanos prefieren ahorrar para otras prioridades".
No obstante, mantiene la esperanza de "salir reforzados" ya que "todas las personas que no han podido sacarse el carné de conducir con anterioridad se lo sacarán en un futuro".
