Lolo Garrido se ha ganado en poco más de año y medio un hueco en el corazón de muchos azulinos por el derroche físico que realiza en cada partido y porque ha crecido a pasos agigantados como jugador desde que llegó a las filas azulinas procedente del Xerez.
Este domingo además se convirtió en poco menos que el héroe del cuadro cañaílla cuando en el minuto 94 lograba el tanto que le servía al San Fernando para sumar un punto de oro en su objetivo hacia la permanencia ante el todopoderoso Marbella.
Pues bien, la cosa no quedó ahí puesto que al final del encuentro cuando se dirigía al túnel de vestuarios se paró a atender a un pequeña, que resultó ser la hija de su profesora de autoescuela. Lolo le firmó a la pequeña un autógrafo y ella le hizo entrega de un dibujo con un campo de fútbol con él en el centro del campo. El siguiente paso lo dio el jerezano que no dudó en quitarse la camiseta para regalársela en un gesto espectacular.