El presidente de EEUU, Donald Trump, dijo hoy que tiene "muchas ganas" de reunirse con el papa Francisco, un día después de que la Casa Blanca anunciara que contactará con el Vaticano para tratar de programar un encuentro con el pontífice durante la visita a Italia en mayo del mandatario estadounidense.
"Tengo muchas ganas de reunirme con el papa", dijo Trump en una conferencia de prensa conjunta en la Casa Blanca con el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni.
El presidente no llegó a confirmar que esa reunión con el pontífice esté ya programada, algo que probablemente implicaría una parada de Trump en la Ciudad del Vaticano antes o después de su visita a la localidad siciliana de Taormina para asistir a la cumbre del G7.
El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, aseguró este miércoles que contactaría con el Vaticano "para ver si pueden acomodar una audiencia con el papa" durante ese viaje.
Esas declaraciones llegan días después de que algunos medios de comunicación revelaran que, al menos hasta la semana pasada, la Casa Blanca no había solicitado una audiencia con el papa para el viaje de Trump, como solían hacer sus predecesores cuando visitaban Italia.
El posible encuentro marcaría el primer contacto oficial que se conoce entre Trump y el papa, que en febrero de 2016 protagonizaron un cruce de declaraciones después de que Francisco dijera que "no es cristiano" construir muros, en alusión a la promesa del político de levantar una barrera en la frontera estadounidense con México.
Trump, que por entonces apenas aspiraba a la candidatura republicana a la Presidencia pero ya lideraba las encuestas, replicó ese día que era "vergonzoso" que "un líder religioso cuestione la fe de una persona".
No obstante, al día siguiente quiso bajar las tensiones al asegurar que el pontífice es "un tipo maravilloso", mientras que el Vaticano aseguró que el papa no quiso hacer un "ataque personal ni una indicación del voto".
El papa Francisco ha expresado posiciones divergentes de las de Trump en varios temas, como su llamada a que la comunidad internacional favorezca una "acogida digna" de inmigrantes y refugiados o su urgencia de hacer más para combatir el cambio climático. E