El alcalde, José Ignacio Landaluce, ha trasladado el pesar, tanto en nombre propio como en el de la Corporación municipal, por el fallecimiento hace unas horas de Carmela Díaz, secretaria general de la coordinadora contra la droga “Barrio vivo”, a consecuencia de una grave enfermedad.
El primer edil ha recordado “la gran labor social que Carmela desarrolló en el ámbito de la prevención de las toxicomanías. Fue un ejemplo constante de entrega y dedicación a la sociedad, especialmente a los jóvenes, y le tocó hacer frente a tiempos muy duros, que siempre superó con voluntad y con una sonrisa”.
“Carmela Díaz forma parte ya de la historia del compromiso social por contar con una Algeciras mejor, junto a nombres como los de Miguel Alberto Díaz y Luis Marquijano, referentes en la lucha contra la droga a nivel local. Ahora, nos toca a los demás continuar con su legado”, recalca la primera autoridad municipal.
Asimismo, Landaluce ha hecho llegar al presidente de la coordinadora, José Luis Díaz, y a todos quienes componen “Barrio vivo”, directivos, monitores, usuarios y socios “el abrazo más sincero en nombre de toda Algeciras, para que sientan el calor humano en unos momentos tan dolorosos como estos”.
Podemos Algeciras se suma a las muestras de condolencias que ha generado hoy la triste noticia del fallecimiento de la secretaria general de Barrio Vivo, Carmela Díaz, “una de las personas que más ha luchado en las últimas décadas en nuestra ciudad por las necesidades sociales y por la estructuración de las barriadas de Algeciras”.
Desde la formación han trasladado sus muestras de pésame y apoyo a los familiares de Díaz, así como a todo el equipo humano que compone Barrio Vivo y al movimiento asociativo en general.
Podemos señala que “con Carmela Díaz, se nos va una de las personas más luchadoras con las que contaba el movimiento social de la ciudad, una persona que siempre estuvo a pie de calle y que ha dejado un grandísimo trabajo no sólo en la prevención y lucha contra la drogadicción, sino en todas las necesidades de inclusión con las que Barrio Vivo trabaja en las barriadas”.
La coordinadora antidroga Barrio Vivo ha lamentado el fallecimiento de Carmela Díaz, que durante más de dos décadas ocupuó la Secretaría General de la entidad y ha sido siempre parte activa de la misma. Desde el colectivo antidroga han hecho pública una carta de despedida que reproducimos íntegra:
"El equipo de personas que componemos la Coordinadora Barrio Vivo lamentamos la terrible pérdida de nuestra amiga y compañera Carmela Díaz, la que fue durante más de dos décadas secretaria general de esta asociación, y nos unimos en el dolor a su familia y a sus muchos amigos y amigas.
Carmela comenzó su trabajo en Barrio Vivo a principios de los noventa, proveniente del Comité Antisida del Campo de Gibraltar, el que colaboró con Antonio y nuestra llorada y eternamente añorada Carmen de la Torre, cuando hacían esfuerzos denodados por crear un recurso que diera esperanza para gente desesperada.
Eran momentos en los que muchas familias llorábamos sin consuelo la pérdida de algún familiar o de algún amigo, por una enfermedad que en muchos casos estaba ligada al mundo de las drogas, enfermedad que llegó a tener dimensiones de pandemia social y humana.
Carmela ha sido siempre una rebelde con causa, la causa de las personas que estaban enfermas, con problemas o al borde de la exclusión social, de ahí que no dudó ni un segundo en asumir su colaboración con el incipiente movimiento de lucha contra las drogodependencias que iniciaron otras mujeres coraje como las madres de los pañuelos verdes de La Línea, los y las valientes de Taraguilla y Miraflores, y nuestros amigos Pepe Chamizo y Luis Marquijano.
Barrio Vivo necesitaba de cabeza y corazón, y en ella encontramos a la persona capaz de diseñar una organización que diera respuesta a las necesidades de dotarse de instrumentos de prevención en una ciudad como Algeciras, con barriadas diseminadas, donde los problemas se acumulaban y las políticas sociales brillaban por su ausencia.
Llegamos a tener más de 200 talleres (informática, teatro, mecanografía, balonmano, futbito, pintura, bailes latinos, escuelas de alumnos y de familias, capoeira, etc.).
Otro frente que cuidó con esmero era el de atención a los drogodependientes y sus familias, sobre todo a los menores, la parte más débil de la sociedad.
Su preocupación por formar a nuestros técnicos y voluntarios resultaba obsesiva, sabedora de que teníamos que dar un servicio de calidad a personas que se lo merecían todo. Logrando crear un equipo humano que, a pesar de la ausencia por su enfermedad, han hecho posible la continuidad de Barrio Vivo.
Desde la Secretaría General supo gestionar Barrio Vivo, incluso en los momentos de crisis y de falta de recursos, adaptándonos a los tiempos. Carmela colaboró con su trabajo con las coordinadoras Alternativas, Nexo y Redes.
Sí, Carmela, tus amigos Paco Mena, Jorge Páez, Álvaro, Isabel, Miguel Alberto, etc., hemos sido sabedores durante todos estos años de que has sido una persona que se preocupa y se ocupa por las causas de los más desfavorecidos y es por ello que te estamos eternamente agradecidos.
Las personas que hoy formamos Barrio Vivo estamos muy tristes y desolados, y sabemos que el mejor homenaje que te podemos hacer es el de seguir adelante con el trabajo que tu iniciaste, a pesar del gran vacío por tu perdida, sabedores que tu recuerdo, tus enseñanzas que nos han permitido ser mejores personas.
Hasta siempre".
