El teniente de alcalde de Urbanismo, Ángel Quintana, ha mantenido un encuentro con la junta directiva de la Asociación de Vecinos La Azada, de la Sierra de San Cristóbal, a fin de valorar la situación urbanística, legal y social de esta zona rural de El Puerto de Santa María.
En dicha reunión se han expuesto las condiciones de vida de 240 familias que habitan en unas 261 viviendas y “que se encuentran en un limbo administrativo desde que la zona quedara excluida de ordenación con la redacción del nuevo PGOU”, según explica Quintana.
Y es que en la redacción del dicho documento se solicitó el tratamiento de este barrio como núcleo rural disperso para poder adecentar la zona y mejorar las condiciones de vida de sus habitantes, pero se desestimó la petición y quedaron en una situación precaria.
“Desde el actual Gobierno nos hemos comprometido a estudiar esta compleja realidad legal, urbanística y social del entorno de la Sierra de San Cristóbal, previa recopilación de datos concernientes a la titularidad del suelo, títulos de propiedad, realidades catastrales, estudio histórico de ocupación y cooperativismo; lo que supondrá unos meses de trabajos previos”, informa el edil de Urbanismo.
En este sentido, ha añadido que “los servicios municipales de Patrimonio, Asesoría Jurídica y Planeamiento trabajarán codo con codo para vislumbrar la realidad administrativa de la zona y, en su caso, adoptar acuerdos políticos posteriores que ayuden a los vecinos a dignificar su vida en una barriada que ha litigado hasta el final el Ayuntamiento El Puerto con la localidad vecina de Jerez y a los que hay que darles respuestas concretas dejando a un lado falsas expectativas”.
En la reunión estuvieron presentes el presidente de la AAVV La Azada Manuel Bonilla, y su vicepresidente Felipe Bonilla, quienes estuveron acompañados además por representantes de la Flave, con su presidenta Milagros Muñoz a la cabeza.
