La Delegación Municipal de Educación, con la colaboración de las delegaciones de Salud y Amdel, pone en marcha este año de nuevo el proyecto dirigido a las minorías étnicas, aunque principalmente a la comunidad gitana, gracias a una subvención de la Junta de Andalucía. La novedad es que si en ediciones anteriores se ha puesto el foco en la divulgación de la cultura gitana, en esta ocasión se dará también apoyo escolar, talleres sanitarios y formación en materia de empleo, entre otras cuestiones.
La concejal de Educación y Amdel, Belén Jiménez, ha presentado hoy martes este programa junto al edil delegado de Salud, Juan Serván. Explicó Jiménez que este programa de Promoción y Desarrollo de la Población Gitana (PICGA) se ha beneficiado de una subvenión por importe de 5.200 euros aportados por la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta, contándose con otros 5.763 euros cofinanciados por el Ayuntamiento. El programa comenzó el pasado 10 de julio, y finalizará el 29 de septiembre.
La edil señaló que el proyecto “busca la integración social de las minorías étnicas, aunque haciendo una especial mención a la etnia gitana. La peculiaridad de este año es que no sólo se trabaja en la divulgación de la cultura gitana para favorecer la interculturalidad de toda la población, sino que también vamos a abarcar otras áreas”.
Explicó que “en el área educativa, vamos a prestar apoyo escolar a los niños lo necesiten, y se dará asesoramiento a los adultos que quieran retomar su formación, ayudándoles en los trámites para acceder a becas, inscribirse en distintas modalidades de formación, en el Centro de Adultos... En el área de Salud -concretó- vamos a trabajar conjuntamente con el Centro de Salud del Casco para llevar a cabo talleres de prevención de embarazos y educación sexual para adolescentes, mientras que también a los mayores se les informará sobre distintas enfermedades”.
“En cuanto a empleo -continuó la concejal-, trabajaremos para derivarlos a Amdel y al Plan de Garantía Juvenil, informándoles sobre las herramientas disponibles para acceder a un empleo. En cuanto a cultura, volveremos a intentar que la historia del pueblo gitano llegue a todos los rincones del municipio, fomentando así la interculturalidad en los ciudadanos. Y en cuanto a vivienda, se les dará información sobre cómo acceder a vivienda protección oficial o cómo presentar solicitudes de ayudas para el alquiler”.
Belén Jiménez finalizó agradeciendo a Salud su apoyo en los talleres, y a la Junta de Andalucía por poner en marcha ésta y otras líneas de subvenciones que permiten al Ayuntamiento prestar este tipo de servicios.
El PICGA se concentrará en las áreas con mayor concentración de población gitana, epsecilamente en las barriadas de Los Olivillos, Simón Susarte, La Paz, Miraflores, Taraguilla y Puente Mayorga. En la memoria del programa se destaca la necesidad de apostar por la educación, si bien se recuerda que “en San Roque los esfuerzos ejercidos sobre este colectivo se ven traducidos en un escaso índice de absentismo de los menores en edad escolar, y en un lento pero progresivo número de estudiantes gitanos que además de terminar los estudios obligatorios, se propone afrontar la carrera universitaria o los ciclos de grado formativos”.
En cualquier caso, “contrasta con el resto de los núcleos sanroqueños Miraflores, donde se observa un elevado índice de absentismo y fracaso escolar”. Por esta razón, se trabajará en el refuerzo educativo con dos aulas de verano para las barriadas de Miraflores y Taraguilla, donde no sólo se trabajará el refuerzo educativo, sino también la educación en valores, inteligencia emocional...
La monitora del programa trabajará también con las familias, ayudándoles en distintas demandas, como la presentación de solicitudes de viendas de alquiler, asesoramiento laboral, gestiones en comedores y de material escolar. Además, cuando sea necesario se derivarán los casos a las oficinas de Amdel en cuestiones de empleo o a Emroque en asuntos sobre vivienda.
En lo referente a cultura, hay previstas actividades destinadas a divulgar las costumbres de la comunidad gitana, en especial de las mujeres, así como dinamizar y promocionar las asociaciones gitanas. Finalmente, en cuanto a salud, se ha previsto un taller de sexualidad en el Centro de Salud enfocado a los adolescentes, de tres sesiones de 60 minutos a la semana, que se dirige no sólo a población gitana, sino de cualquier minoría étnica. Se centrarán en aspectos como la concienciación sobre las consecuencias sociales y personales de los embarazos y sobre métodos anticonceptivos, y sobre la prevención de las enfermedades de transmisión sexual.
