El joven de 27 años investigado por haber tratado de matar a finales del pasado agosto a una chica de 14 años con la que mantenía una relación, y que apareció malherida en una obra del Cerrillo de Maracena, en Granada capital, ha sido condenado a nueve meses de prisión por saltarse meses antes la orden de alejamiento que tenía vigente ya entonces hacia ella.
El juicio oral se ha celebrado este miércoles en el Juzgado de lo Penal 2 de Granada, en Caleta, derivado de la causa que inició el Juzgado de Instrucción 1 de Granada, a raíz de la denuncia de la madre de la niña al verlos juntos después de que fuera avisada, el 1 de marzo de 2017, desde el instituto de la menor, que había salido con este individuo, pese a la orden cautelar de alejamiento que tenía por otra denuncia previa de la progenitora por una supuesta agresión sexual un mes antes.
El acusado ha reconocido los hechos por lo que ha sido condenado 'in voce' por el juez de lo Penal, tras un acuerdo de conformidad entre las partes.
En principio, la Fiscalía pedía multa de 5.400 euros, al igual que la acusación particular, que ejerce el despacho granadino HispaColex Bufete Jurídico, en nombre de la familia de la víctima, si bien, una vez que se ha demostrado, en el transcurso de la investigación posterior, que había una relación entre el joven y el menor --y por tanto se puede considerar violencia machista según el Código Penal--, ambas partes acusatorias han pedido nueve meses de prisión, a lo que la defensa no se ha opuesto.
Al tener antecedentes penales por violencia machista contra otra mujer, ésta mayor de edad, el juez ha notificado que no se puede suspender la pena impuesta este miércoles.
Igualmente, el Juzgado de Instrucción 1 de Granada ya había acordado el pasado 1 de septiembre prisión provisional, comunicada y sin fianza para este individuo, por la presunta comisión de delitos de tentativa de homicidio, agresión sexual y quebrantamiento de la medida cautelar de alejamiento de la menor.
El titular del Juzgado de lo Penal 2 que lo ha enjuiciado este miércoles ha hecho referencia a este otro caso contra la misma menor para señalar que "implica cierta gravedad y peligrosidad del sujeto".
Por otra parte, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer 2 de Granada, responsable de la investigación desde el pasado 4 de septiembre de los hechos acaecidos en el Cerrillo de Maracena, ha declarado esta causa "compleja" por lo que se ha prorrogado a 18 meses el periodo para su instrucción desde su incoación, según un auto al que ha tenido acceso Europa Press.
El Ministerio Fiscal --una vez cumplido el plazo inicial de medio año dado por la ley para las diligencias desde su apertura-- pidió que se declarara "compleja la instrucción".
Ante ello, "habiéndose declarado con anterioridad compleja la investigación" que seguía el Juzgado de Instrucción número 2 contra este joven por otra posible agresión sexual, "y valorando las diligencias de prueba pendientes de practicar", la magistrada ha accedido a declarar compleja la causa, por lo que el periodo de investigación puede prolongarse por al menos otro año.
La investigación está pendiente, según fuentes del caso, de la completa recuperación física y psíquica de la víctima, que habría sido agredida sexualmente en una obra del Cerrillo de Maracena tras recibir unas 20 puñaladas.
Como señaló el Juzgado de Instrucción 1 de Granada en su auto de 1 de septiembre, consultado por Europa Press, hay indicios de que el acusado, "bajo la excusa de que tenía que hablar" con esta chica que quería terminar la relación que mantenían, la convenció con el fin de que "fueran a un inmueble en construcción". Allí, en la tarde del 29 de agosto, "actuando con el decidido propósito de terminar con la vida" de la niña, "sin perjuicio de golpearla repetidamente, la emprendió a pinchazos, sirviéndose de una navaja, por diversas partes del cuerpo, dejándola allí abandonada una vez pensó que había alcanzado su propósito".
Sobre las 08,38 horas del día siguiente, unos vecinos del lugar avisaron a la Policía de que una persona se encontraba en las inmediaciones pidiendo auxilio, siendo localizada la chica, que pasó horas malherida, en una de las habitaciones "en estado muy grave y casi sin poder articular palabra".
A la primera persona que acudió en auxilio de la niña, le dijo que "su novio la había violado y le había dado una paliza". Los policías que llegaron al lugar, tras dar aviso un vecino, ya en la mañana del día siguiente, temieron, efectivamente, por la vida de la niña.
Cuando el 061 acudió finalmente en su ayuda, se desmayó. Con posterioridad, la menor refirió a su madre en el hospital que el supuesto agresor "de repente, le dio un golpe en la cara y le agredió con una navaja en múltiples ocasiones".
En un hoyo destinado a la construcción de una piscina es donde fue localizada una navaja cerrada con cachas de color marrón, según la documentación que obra en poder de los investigadores, en la que también consta que a él, esa tarde, lo ven un par de conocidos, sin camiseta y con rastros de sangre, en las inmediaciones de la estación de autobuses de Granada, en el mismo área geográfica de la capital.
AUTO DE LA AUDIENCIA
Por una cuestión de delimitación de ámbitos jurisdiccionales, el caso pasó ya por la Audiencia Provincial de Granada, que determinó "la competencia objetiva" para investigar los hechos del Juzgado de Violencia sobre la Mujer.
La titular del tribunal especializado en violencia machista había argumentado a la Audiencia que una niña de 14 años no puede tener una relación, "dada la diferencia de edad, análoga a la matrimonial". El Juzgado de Instrucción mantuvo que había una relación entre ellos y que mantenían contacto a través de una aplicación telefónica de mensajería instantánea y redes sociales.
La Audiencia Provincial de Granada, en un auto de fecha de 30 de octubre del pasado año, al que tuvo acceso Europa Press, ratificó que "ambos sujetos mantenían una relación sentimental que la menor (...) pretendía finalizar el día que acaecieron los hechos".
Ha sido precisamente a este auto de la Audiencia Provincial al que se ha referido el Ministerio Público, en el juicio de este miércoles en Caleta, para justificar el cambio de petición de pena para el acusado que mantenía, ha indicado la representante de la Fiscalía, una relación de "pareja sentimental" con la víctima.
El quebrantamiento de la orden de alejamiento impuesta en febrero, por el que ha sido condenado este miércoles el joven de 27 años, tuvo lugar el 1 de marzo y fue denunciada por la madre ante la Policía Nacional. El Juzgado de Instrucción 9 de Granada la archivó inicialmente al comprobar que se veía con la menor con asiduidad en el marco de una relación entre ambos, si bien el de Instrucción 1 abrió la causa al llegarle a través de la Guardia Civil, según han informado fuentes del caso.