Con muy buen sabor de boca se ha quedado la delegación de Manos Unidas en Cádiz tras la celebración en la jornada del domingo de la Marcha Solidaria en favor de 300 mujeres de la India. En palabras de su delegado, Sebastián Fernández, “la participación ha sido muy buena y la lluvia ha respetado la convocatoria”.
Desde las once de la mañana, en el Auditorio Costa Rica del Parque Celestino Mutis, la organización de la marcha solidaria se afanaba en repartir los dorsales entre los participantes de esta iniciativa, que tenía lugar en otros lugares del panorama nacional. Hasta el lugar acudían familias y jóvenes, procedentes de grupos de scouts que acudieron a la llamada de Manos Unidas.
Según los datos que maneja la ONG, han participado unas 150 personas, aunque “ha habido inscritos que no asistieron y otros que se apuntaron el mismo domingo con el dorsal 0”, ante el temor de la presencia de lluvia. Tal y como pretendía Manos Unidas la convocatoria fue una jornada festiva y familiar. Al final, tras la marcha solidaria que recorría desde el parque de Astilleros, toda la avenida de la Bahía “tuvimos un taller de zumba muy participativo”. El objetivo era la recaudación destinada al empoderamiento de 300 mujeres de la India. El papel de la mujer en este país no tiene nada que ver con la independencia, ni con la seguridad. No tienen voz y quedan relegadas a un último plano en el estrato social.