Agentes de la Policía Nacional, en una actuación conjunta con Europol, han detenido en Dos Hermanas (Sevilla) a una persona por su presunta integración en un grupo criminal supuestamente dedicado al tráfico ilícito de armas que fue desarticulado por investigadores de la Comisaría General de Información a finales del pasado año.
El arrestado en esta segunda fase operativa, N.R.T., es considerado como uno de los principales colaboradores de esta red, que se había especializado en la adquisición ilícita de piezas de armas de fuego en el extranjero que posteriormente rearmaban con la finalidad de obtener armas aptas para el disparo, mediante la técnica conocida como "canibalización". Al arrestado se le imputan los delitos de depósito y tráfico ilícito de armas de guerra y municiones y pertenencia a grupo criminal. Se ha practicado además el registro de su domicilio.
Del análisis de la documentación y del material informático intervenido en los registros practicados en la primera fase de la investigación se ha determinado que el entramado criminal tenía ramificaciones al otro lado del Atlántico. Concretamente, contaba con colaboradores en Estados Unidos que nutrían a la red de piezas de armas adquiridas en ese país. N.R.T., así, "tenía relación directa con la estructura radicada en el país norteamericano", según la Policía Nacional.
El líder del grupo criminal, detenido en la primera fase de la operación y actualmente en prisión, empleaba los servicios de paquetería postal para introducir de manera subrepticia piezas fundamentales en el territorio nacional. Posteriormente creaba nuevas armas a través de la "canibalización", procedimiento que consiste en la utilización de piezas procedentes de diferentes armas de fuego para la creación de armas completas. Para ello, se surtía de una extensa red de colaboradores, entre los que se encuentra el ahora detenido.
En el registro practicado en diciembre, los agentes intervinieron en el domicilio del líder del grupo un depósito de armas formado, entre otros efectos, por dos subfusiles automáticos inutilizados junto con dos cañones y dos correderas para esa misma arma. Unas armas de guerra que, tras los análisis periciales, se ha probado que una vez rearmadas eran aptas para el disparo.
Además, se localizaron un rifle de cerrojo del calibre 5.56 activo, un rifle de cerrojo del calibre 22 Little burguer activo, dos rifles del calibre 22, un arma corta Glock activa, 14 armazones de armas Glock, diferente munición de guerra del calibre 5.56, más de 2000 cartuchos del calibre 9 milímetros, cañones Glock, agujas percutoras y distintas piezas, entre ellas once silenciadores.
La operación de la Policía Nacional continúa en fase de instrucción, por lo que no se descarta que se produzcan nuevas detenciones. La presente investigación fue desarrollada en sus inicios en colaboración con las autoridades policiales austriacas.
Además, esta actuación policial se ha realizado de manera conjunta con Europol y con la participación de sus analistas del Área de Inteligencia de Armas y Explosivos.
