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?Nadie en sus cabales aceptará ser candidato del PA en 2011?

Estefanía Benítez se afilió al PA en enero de 2007 y dos años y medio le han bastado para darse cuenta de que no era el partido nacionalista que ella imaginaba

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  • Estefanía Benítez en la redacción de 'Información' y 'Viva Chiclana'. -
No iba de farol cuando anunció públicamente su dimisión como militante del PA. Estefanía Benítez remitía el viernes un burofax para notificar al partido su baja voluntaria. La suya y la de otros siete militantes. Se afilió a esta formación en enero de 2007 y dos años y medio le han bastado para darse cuenta de que el PA no es ese partido nacionalista que ella imaginaba.

—¿Ha recibido alguna llamada de las altas esferas tras su anuncio?
—Ninguna. Me han llamado muchos compañeros de Chiclana y otra mucha gente pero de las direcciones del PA nadie.

—José Luis Velázquez, Javier Bejarano y, ahora, usted, ¿qué está ocurriendo en el PA local que no resiste ningún secretario?

—Lo que ocurre es que los de arriba han puesto en Chiclana a una persona que donde pisa no crece la hierba. Y sólo por los votos. El problema del PA de Chiclana es, fundamentalmente, Manuel Guerrero. Este señor acaba con lo que toca, si mañana entra en una asociación cultural se la carga.

—Se afilió al PA hace poco más de dos años, ¿qué ha visto que se ha decepcionado tanto?
—La falta absoluta de disciplina. Hay mucha gente que se salta a la torera las leyes internas sin que se les abra expediente. Además, al PA le importa muy poco los ciudadanos y mucho los números. Les da igual que se engañe a la ciudadanía, les da lo mismo si se hace o no una política honesta con tal de conseguir un sillón. No hay una ideología definida, el nacionalismo del PA es de pacotilla. O, a lo mejor, es que yo soy demasiado idealista y pensé que la política era otra cosa.

—¿Qué es lo que ha hecho que se decida a marcharse?
—Que no se hayan tenido en cuenta las decisiones del comité local. Hemos puesto en conocimiento de los niveles superiores todo lo que estaba ocurriendo con Manuel Guerrero muchas veces, incluso se lo he trasladado a la propia secretaria general, Pilar González, pero siempre nos han dado largas. En algunos casos nos prometían que se le abriría expediente pero nada. Y eso pese a que en reuniones de arriba algún que otro dirigente ha dicho que si a Guerrero no lo quitaban presentaba su dimisión. Pues sigue ahí y nadie ha dimitido.

—¿Qué tiene Guerrero que arrastra tantos votos?
—Las mentiras. Juega con los sentimientos y las ilusiones de la gente, y eso no tiene perdón. Por conseguir votos es capaz de prometer lo que sea. Yo he oído cómo le decía a una persona que si entraba en el Ayuntamiento le daba un piso directamente, cuando eso es imposible. Por desgracia hay mucha necesidad y hay gente muy ingenua, y Guerrero se vale de eso. Yo prefiero sacar la mitad de votos pero no jugar con las personas ni engañar.

—¿Cuándo empezaron sus diferencias?
—Ya a mí no me gustó su forma de hacer campaña, pero era novata y me callé. Cuando estábamos en el cuatripartito nuestras discrepancias empezaron a ser mayores.

—¿Por qué no abandonó entonces?
—Porque en el cuatripartito ya había suficientes problemas internos, y algunos graves. No quería echarle más leña al fuego con una crisis entre Guerrero y yo. Ya una vez en la oposición los compañeros me pidieron que aguantase, que se solucionaría. Tenía esperanzas de que así fuera pero los de arriba no nos han respaldado. De lo que ha ocurrido culpo más a los que están por encima, que al propio Guerrero, porque él puede ser como sea, pero los de arriba tenían la posibilidad de poner remedio y no lo han hecho.

—¿Se sintió ninguneada durante el cuatripartito?
—Totalmente, pero sobre todo por parte de Guerrero. Había reuniones de pacto y yo no lo supe hasta el final prácticamente.

—¿Estuvo de acuerdo con aquel pacto de Gobierno?
—Yo me vi arrastrada por Guerrero, que era el que iba a las reuniones y el que tenía la información. Aún así no me arrepiento, que conste. Pero sí es verdad que yo sospechaba que aquello no iba a funcionar. Era muy complicado. Éramos cuatro partidos con líneas políticas muy diferentes.

—Defina a Guerrero.
—Una persona sin prudencia, sin respeto a nadie ni a nada y totalmente falta de disciplina. Él piensa primero en él, luego en él, y por último en él, creyéndose el salvador. No tiene humildad.

—¿Qué es lo que más le ha dolido de lo que ha dicho o hecho?
—Me molestó mucho que cuando yo estaba de baja con una amenaza de aborto, fue diciendo por ahí que yo no acudía a los actos porque era una floja. Con la salud y con los hijos no se juega.

—¿Qué futuro le augura al PA de Chiclana?
—Negro. Esta formación está muerta y enterrada. Y si sigue Guerrero dentro, lo único que puede pasar es que todo el mundo ataque a este partido porque este señor es la vergüenza de Chiclana.

—¿Cree que Guerrero durará mucho en el PA?
—Si el partido es como está demostrando ser, lo mantendrá porque es lo que le pega. Él seguirá porque no le queda otra, a dónde va a ir. Pero si realmente existe el nacionalismo no debería estar ni Guerrero ni otras muchas personas.

—Una quiniela. Próximo secretario/a local.
—Está difícil, es que son tan pocos. Hay gente muy válida pero teniendo en cuenta que se pone de presidente de la gestora a un señor con sentencia firme de inhabilitación, ya me puedo esperar cualquier cosa. No creo que este señor sea el ejemplo a seguir.

—Candidato/a a las elecciones.
—Más difícil todavía. No creo que pongan a Guerrero y si lo hacen es que son masoquistas. Y complicado tienen encontrar a otra persona. El que se atreva a encabezar la lista del PA es que lo hace engañado, es muy cortito o tiene otros intereses. Nadie en sus cabales y con dos dedos de frente se atreverá a ser candidato del PA en Chiclana.

—Resultados del PA en 2011.
—Si consiguen engañar como hasta ahora lograrán un concejal, pero lo normal es que ninguno.

—¿Qué le diría a los que opinan que sus diferencias con Guerrero se han debido a su ansia de poder?
—Si fuera así no me habría ido, porque me dijeron que tenía muchas posibilidades de ser la próxima candidata, pero ni de coña aceptaría yo eso.

—Dijo que no descartaría integrarse en otro partido, ¿tiene alguno a la vista?
—Después de mi experiencia, antes de afiliarme a otro partido intentaría conocer a fondo la verdadera ideología de cada uno. Lo estudiaría todo mucho. Me precipité al afiliarme al PA y no quiero volver a equivocarme.

—¿Ha recibido alguna llamada de miembros de otros grupos municipales?
—Sí, de casi todos.

—¿Le han hecho alguna propuesta?
—(Guarda un sospechoso silencio). Si la hubiera no la diría.

—¿Qué le parece los duros enfrentamientos de los últimos plenos?
—Una vergüenza. Es de muy mal gusto que se llegue al insulto, a los ataques personales y a las ofensas. No se debería entrar en esa dinámica. Políticamente que se digan lo que quieran pero en los temas personales no se puede entrar. Yo apuesto, ante todo, por el respeto a las personas, pero como eso ni vende ni gusta, pues así va.

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