La Asociación Élite Taxi Sevilla ha convocado para la mañana de este lunes una nueva caravana de coches por las calles de la capital andaluza, en demanda de avances en el borrador propuesto para la ordenación y modernización del sector del transporte discrecional en vehículos turismo, que abarca tanto a los taxis como a los vehículos de transporte concertado (VTC).
La caravana o "caracolada" de taxis está convocada para las 9,30 horas y su recorrido arranca desde la avenida de Dinamarca, en Los Bermejales, para atravesar las avenidas de Jerez y de la Palmera, los paseos de las Delicias y de Cristóbal Colón, las calles Arjona y Torneo, el puente de la Barqueta y la avenida de Américo Vespucio, donde la movilización concluirá en torno a las 13 horas, según la convocatoria recogida por Europa Press.
En ese sentido, esta nueva protesta, paralela a las promovidas por Unión Sevillana del Taxi y Solidaridad Hispalense del Taxi con concentraciones a las puerta de la sede de la Consejería de Fomento, está destinada a reclamar a dicho departamento autonómico y a los ayuntamientos que, en el marco de sus competencias y con relación a los VTC, impidan "lo que sólo puede verse como intrusismo" porque "tras 10 meses de negociación" las autoridades "no atienden a las reivindicaciones originales" del sector del taxi.
Groso modo, el mencionado borrador de la Junta, derivado del decreto estatal de otoño de 2018, contempla la posibilidad de que los taxistas ofrezcan un precio cerrado al usuario en los servicios precontratados o realizar servicios cobrando por plaza, mientras en el caso de los VTC que operan para empresas de alquiler de coches con chófer como Uber o Cabify, las propuestas de la Consejería de Fomento incluyen la creación de estaciones para los mismos en el perímetro de los núcleos urbanos, para que estén obligados a regresar a dichas estaciones cuando completen sus servicios, "salvo que tengan otro servicio precontratado".
No obstante, las principales organizaciones de taxistas no comparten la idea de habilitar estaciones de VTC ubicadas en el perímetro de los núcleos urbanos, insistiendo en la reivindicación principal de que los servicios de los vehículos de transporte concertado estén sujetos a un "tiempo mínimo de precontratación".
LA PETICIÓN DE LOS 30 MINUTOS
A tal efecto, recordemos que las principales asociaciones de taxistas de Sevilla capital y el propio Ayuntamiento hispalense solicitaron en el pasado mandato municipal a la Junta que ciñese la contratación de los servicios de VTC a una antelación mínima de entre 30 minutos y una hora, con la obligación de que estos vehículos regresen a sus bases tras cada porte, entre otros aspectos.
Por eso, los taxistas de Sevilla vienen lamentando que el mencionado borrador no incluya la demanda relativa a la antelación mínima para la precontratación de los VTC, extremo contenido en las alegaciones formuladas por las asociaciones frente a la propuesta inicial de regulación de la Consejería de Fomento.
Y es que el sector local del taxi acusa a los conductores de VTC de invadir su ámbito de actuación e incurrir continuamente en situaciones de "intrusismo", pues la regulación de los vehículos de transporte concertado, por ejemplo, prohíbe que estos conductores circulen a la búsqueda aleatoria de clientes, capten viajeros de manera espontánea o utilicen los carriles reservados a los autobuses públicos y taxis.
Los conductores de VTC, por su parte, han denunciado no pocas situaciones de coacción o incluso daños a manos de taxistas, dando lugar a una causa judicial en toda regla que investiga tanto a la asociación Solidaridad Hispalense del Taxi por supuestas coacciones para acaparar la parada del aeropuerto, como a diversos taxistas a título individual.