La Asociación de la Prensa de Cádiz (APC) solicitará la apertura de expediente para conceder al periodista José María Calleja la distinción de Hijo Adoptivo de la ciudad de Cádiz a título póstumo. La entidad ha argumentado en su candidatura la dilatada carrera en defensa de la libertad, así como su fuerte vinculación a Cádiz, donde residía largas temporadas y participaba de forma activa en su cultura.
El fallecimiento por coronavirus del periodista José María Calleja ha supuesto una triste noticia para el mundo de la cultura y el periodismo gaditano, con el que guardaba una estrecha relación, según ha informado la APC en una nota. Una vinculación que nació en 1994 con la entrega del III Premio Agustín Merello. La APC reconocía entonces la valentía y la defensa de la libertad de prensa de un grupo de periodistas amenazados por ETA en el País Vasco, entre los que estaba Calleja.
Desde aquel día comenzó a pasar temporadas en Cádiz, donde hizo buenos amigos y participaba de forma generosa en actos sociales y culturales. La Asociación de la Prensa gaditana remacha en su petición la dilatada trayectoria de este maestro de periodistas.
Doctor en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense, Calleja era un periodista de raza, curtido en la trinchera de la libertad, primero contra el franquismo en Valladolid y más tarde, en los años 80, plantando cara al terrorismo de ETA desde las redacciones de EFE y Euskal Telebista.
Su defensa de la democracia y de las libertades constitucionales le llevaron a la lista de objetivos de la banda armada y de ahí a vivir pegado a una escolta. José María Calleja era asiduo a tertulias en todas las cadenas de televisión y radio generalistas. Autor de una docena de libros, en los últimos años se le podía oír en el programa Hoy por hoy de la Cadena Ser.
Desde la APC se ha querido rendir homenaje y poner de relieve "su figura como un ejemplo en la ciudad de la libertad, que tan bien lo acogió y a la que decía poder venir siempre sin escolta".