El sector de la moda flamenca, --muy presente en la provincia de Huelva donde se suceden las romerías en primavera, entre ellas, la del Rocío, que se celebraba este fin de semana--, tiene las miras puestas en el próximo año tras perder la campaña, al coincidir la declaración del estado de alarma y todo el periodo de desescalada, con el periodo de esplendor de las distintas romerías.
Así lo ha puesto de manifiesto en declaraciones a Europa Press Susana Jiménez, gerente de El Ajolí, empresa dedicada a la moda flamenca desde 1981 con tienda en Huelva y con presencia en otros puntos de venta en otros lugares del país.
Díaz ha indicado que "la temporada está perdida" con toda la inversión realizada, los encargos de primeras romerías y trajes ya hechos y los complementos, entre otros gastos. De hecho, su empresa se ha tenido que acoger a un ERTE ante la imposibilidad de seguir la actividad. En concreto, ha subrayado que el día 13 de marzo, --un día antes de la declaración del estado de alarma--, tenían pendientes de corte 289 trajes.
"Ha sido un parón en seco y sin perspectivas de que en estos meses esto vaya a tener otra salida", ha proseguido Jiménez, que ha recordado que la moda flamenca es "estacional", por lo que hay poco margen o alternativas. De hecho, como ha señalado hay negocios que se han visto "doblemente perjudicados" al realizar moda flamenca y de ceremonia y "todo está anulado", ha proseguido.
En esta misma línea se ha pronunciado Francis Santana, de Santana Diseño, --ubicado en Lepe--, quien ha indicado que tiene abierta su tienda desde el pasado día 11 pero no ha vendido artículo alguno. Su negocio se centra en la moda flamenca, en ropa para eventos y en complementos, y ahora, dado que no se vende nada para festejos al estar suspendidos, se ha decantado por la confección de mascarillas, las cuales complementa con frases divertidas para hacerlas más originales.
Por su parte, Susana Díaz ha remarcado que también realizaron al principio mascarillas solidarias para surtir a trabajadores del campo, por ejemplo.
Asimismo, Santana coincide con su compañera en que "hay que pelear en 2021 por la colección de 2020", la cual, en su caso, presentó en la pasarela We Love Flamenco, pero que se ha visto truncada por este "parón en seco".
Cuestionada por si ve factible reinventarse y barajar otra opción de negocio, Díaz ha indicado que "mirar otra posibilidad de negocio es difícil" porque "no se ha recuperado lo invertido", y para ello, "se necesita tener las espaldas cubiertas", de manera que "sin recuperar la inversión es difícil".
"Reinvertarse en un trabajo de campaña es difícil porque nuestro trabajo es estacional, no tienes unos ingresos continuos", ha explicado Jiménez. Por ello, ha subrayado que entre el sector se ha abordado que "esta campaña sea la de 2021" ya que los diseños no han sido lucidos y así poder afrontar los gastos invertidos en este año 2020.
En este aspecto, Santana ha apuntado que la colección de 2020 podrá tener algún descuento para el próximo año, incidiendo en que "todos los negocios estamos tocados" por esta crisis, y abogando por la unidad del sector, sobre todo en estos momentos complicados. Además, ha pedido ayudas para un sector que genera riqueza y empleo en el territorio, como es la moda flamenca.
Finalmente, ambos han incidido en la necesidad de que el sector sea "visible" porque, como ha recordado Díaz, al principio no podían acogerse a ERTE porque "no era un sector de riesgo, ni de primera necesidad", por lo que "estaban en tierra de nadie", siendo una actividad "estacional" y todo esto "ha pasado en plena campaña". "Somos un sector que necesita ayudas como cualquier otro", ha proseguido Santana, que ha reiterado la gran afección para esta actividad al producirse el confinamiento y parada de la actividad en primavera, momento álgido para la moda flamenca.