Queda justo una semana para que caduque la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto CEUS, el Centro de Ensayos para Sistemas no Tripulados proyectado en El Arenosillo y que supondría un antes y un después para la provincia en el sector de la aeronáutica.
Cuando ya se daba todo prácticamente por perdido, salía este miércoles a escena la Caja Rural del Sur, con el apoyo de grandes empresas onubenses, anunciando su disposición a facilitar cuatro millones de euros para que la falta de fondos no sea un impedimento para que el proyecto eche a andar y no haya que empezar de nuevo toda la tramitación administrativa.
Este jueves ha sido la Unión Profesional de Huelva la que ha hecho público su estudio técnico y económico sobre el proyecto, en el que concluye, por un lado, que la colaboración público-privada es la única forma de evitar que caduque la DIA, por lo que respalda la iniciativa de la Caja Rural, y por otro explica que sólo el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), como promotor del proyecto, puede acabar con este desbloqueo simplemente comunicando el inicio de las obras, que un primer momento incluso tendrían coste cero para el organismo dependiente del Gobierno central.
Así, el estudio, al que ha accedido Viva Huelva, es claro al afirmar que “la inmediata solución a la paralización pasa por evitar dicha caducidad, lo cual se lograría, y ahí están todas las administraciones de acuerdo, con el inicio de las obras”.
Bastaría, según entiende la Unión Profesional, con el desbroce del terreno, una fase inicial que “se realizaría a coste cero, dada la implicación del Ayuntamiento de Moguer a la hora de licitar su contratación a una empresa que, además, abonaría el coste estimado del aprovechamiento de la madera”.
Pero para iniciar las obras hay que cumplir unos requisitos que marca la DIA, como son un estudio ambiental que estaría “muy avanzado” según el INTA, un calendario detallado de obras y un estudio arqueológico que “no consta si ya se ha solicitado”, explica la Unión Profesional.
Con ambos estudios, el calendario al menos de la fase inicial de desbroce y la licencia de obras municipal, competería al INTA la comunicación formal a la Junta de Andalucía del inicio de las obras, evitando así la caducidad de la DIA.
Contrarreloj
El tiempo corre en contra y la Unión Profesional advierte que la obtención de una Declaración de Impacto Ambiental “conlleva numerosísimos trámites y, por tanto, su caducidad, puede echar por tierra el trabajo llevado a cabo hasta el momento”.
Y es mucho lo que se juega Huelva con el CEUS, por “la trascendencia que puede tener en cuanto a inversiones, así como la consolidación de Huelva en el panorama mundial de a experimentación e investigación en el tema de los drones”.
