La Guardia Civil ha investigado a un hombre de 52 años, con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de maltrato de animales domésticos por supuestamente haber dejado morir de hambre, sed y frío a una yegua en Güéjar Sierra, en el área metropolitana de Granada.
El pasado 28 de diciembre, la Guardia Civil tuvo noticias de que a través de una conocida red social se había difundido un vídeo en el que se veía un caballo de color negro "extremadamente delgado, agonizando en una zanja en un paraje del término municipal de Güéjar Sierra, junto al embalse de Canales".
Así las cosas, abrió una investigación y la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Guadix se encargó de las pesquisas.
Los agentes del Seprona localizaron la parcela donde supuestamente tenía que estar el caballo, pero solo encontraron un pequeño túmulo donde se observaba tierra recientemente removida. Posteriormente, la Guardia Civil averiguó que allí el actual propietario había enterrado al caballo tras su muerte.
Mientras tanto, el Seprona había pedido a una veterinaria granadina un informe en relación con las imágenes que se ven en el vídeo. Concluyó que "se trata de un caso de maltrato animal en grado superlativo y continuado hasta la muerte del animal por hambre, sed y frío".
A la vista de las imágenes, mantuvo la veterinaria, "el estado caquéctico del animal convertido en huesos y pellejos es impresionante. Lo salido de los huesos de la cadera y el hundimiento de los flancos indican claramente un maltrato animal al no haber sido alimentado en las últimas semanas o quizás meses de alimentación deficiente". Y por último subrayó que el propietario de la yegua "no procuró los servicios de un veterinario para aliviar la agonía cruel del animal".
A la vista del informe, la Guardia Civil localizó al propietario del animal, que reconoció que la yegua estaba enterrada en el túmulo localizado por los agentes del Seprona, y lo puso a disposición del juzgado de guardia de Granada en calidad de investigado como presunto autor de un delito de maltrato de animales domésticos.