La crisis del coronavirus ha abocado al cierre a numerosos comercios de Jerez desde marzo y ha vuelto a azotar más fuerte que nunca al centro de la ciudad, dejando huérfanas a calles como Gravina, un atajo -no exento de encanto- que muchos ciudadanos cogen desde Santa María para dirigirse a la calle Larga o a la inversa. Pese a su ubicación privilegiada, su función comercial lleva meses extinguida por culpa de la pandemia tras el cierre del bar La Cuadra y la agencia de viajes, que sigue concertando citas, pero por teléfono. Esta realidad cambió el pasado 2 de diciembre, con la apertura de Mundopeluches.es, la primera tienda física que las hermanas alicantinas Tina y Magda Sempere abren fuera de un parque zoológico.
Una decisión valiente que surgió durante el confinamiento “porque era el momento de ilusionarse y arrancar” y con la que apuestan más que nunca por el comercio de proximidad, aunque siguen online. “Con mucho esfuerzo” consiguieron abrir para la campaña de Navidad y “montamos la tienda en diez días”, explican a Viva Jerez. Lo tienen claro: vienen para quedarse y para que su compromiso con los animales y el medio ambiente cale más que nunca. ¿Cómo? A través de un “zoo” de peluches realizados con plástico reciclado y con el que colaboran con planes internacionales para la conservación de especies en grave peligro de extinción, como por ejemplo los orangutanes.
Su idea es “seguir creciendo”, aunque ahora mismo el Covid no se lo permita, y hacer talleres y actividades relacionadas con el mundo animal en un futuro. Por el momento, están encantadas con la acogida que han recibido de los vecinos de la zona y los propios comerciantes, que les animan a que sigan para adelante y les felicitan por haberse animado en estos tiempos y haber devuelto la luz a este ‘callejón’. “Es una tienda muy colorida que transmite mucho y a nosotros nos enamoró tanto el local como la calle. Tiene una luz especial, tiene encanto”, señalan confiadas en que pronto lleguen nuevos ‘vecinos’ a esta céntrica vía. “La gente nos pregunta muchísimo cuándo va a abrir el bar o la agencia de viajes. Todo esto va a pasar y volveremos a viajar también, es importante que cuando acabe todo hayamos aprendido algo”, señalan.
Hace diez años que viven en esta ciudad y sabían que los jerezanos no iban a defraudarles, como así ha sido. “Por primera vez queríamos arriesgarnos e intentarlo. Tenemos una concesión con tres parques, el Zoobotánico de Jerez, el de La Rerseva del Castillo de Las Guardas (Sevilla) y el de Córdoba. Llevamos muchos años tratando con el público de Jerez, con el que tenemos mucho contacto, pero no es lo mismo una visita al zoo dos veces al año, aunque tengamos los socios, que este contacto más regular”, explican. Un mes después no pueden estar más contentas por la respuesta de los más pequeños y de los Reyes Magos. “Ha sido una Navidad muy especial, han venido abuelos a mandar regalos a sus nietos porque no iban a poder viajar. Ha sido muy emocionante, además, nosotros también somos de fuera, de Santa Pola, en Alicante, y sabemos lo que es eso".
