Tres todoterrenos de alta gama, de la misma marca y modelo, que habían sido sustraídos en el plazo de una semana en Madrid, supuestamente por encargo de una banda dedicada al tráfico de drogas, han sido interceptados por agentes de la la Policía Nacional de la Comisaría de Estepona (Málaga), que ha detenido a sus tres ocupantes tras una persecución que concluyó en Manilva (Málaga), justo antes de adentrarse en el término municipal de San Roque.
Tras ser detectado el primero de los turismos sustraídos en la vía AP-7, en dirección a Algeciras, se inició un dispositivo policial para su interceptación, y finalmente el todoterreno chocó de manera violenta con un camión que circulaba por la misma vía, ha informado este martes la Policía en un comunicado.
Agentes de paisano detectaron un todoterreno de alta gama que realizaba una brusca maniobra en medio de la vía y, al consultar las bases de datos policiales, comprobaron que había sido sustraído en Alcobendas (Madrid), por lo que establecieron un dispositivo de seguimiento para su interceptación.
Durante el operativo policial los agentes detectaron otros dos vehículos, de idénticas características y supuestamente relacionados con el anterior, que circulaban por la AP-7 en la misma dirección y que también figuraban como sustraídos.
En el seguimiento el vehículo aumentó su velocidad hasta superar los 200 kilómetros por hora, y los agentes establecieron un control en el peaje de Manilva para intentar detener su marcha.
Al alcanzar dicha ubicación, y tras percatarse del cierre policial, el turismo ignoró las señales, impactó contra la barrera del peaje y prosiguió su fuga.
Las patrullas continuaron con la persecución durante otros treinta kilómetros, hasta que perdió el control e impactó violentamente contra un camión.
El ocupante intentó escapar a pie, aunque los agentes le dieron alcance procediendo a su detención, y tanto el detenido como el conductor del camión no sufrieron heridas de consideración.
Mientras, en el peaje de la AP-7 fue interceptado por una patrulla el segundo de los vehículos sustraídos, cuyo conductor no opuso resistencia a su detención.
Finalmente, el último de los todoterrenos fue bloqueado en el punto kilométrico 138, y también fue detenido su conductor.
Tras las pesquisas, los investigadores determinaron que los tres turismos, de la misma marca y modelo, fueron sustraídos en el intervalo de una semana en diferentes municipios de Madrid.
Dichos hechos habían sido llevados a cabo, supuestamente, por integrantes de una organización criminal dedicada a la sustracción de vehículos de alta gama, generalmente por encargo, para abastecer a otros grupos criminales dedicados al tráfico de drogas.
