La Policía Nacional ha detenido en la barriada de La Chana y puesto a disposición judicial a dos varones de 23 años y nacionalidad marroquí, con antecedentes policiales y sin permiso de residencia legal en España, como presuntos autores de un delito de amenazas, tras esgrimir un destornillador y proferir amenazas de muerte a una pareja de clientes y a un empleado de una inmobiliaria que les recriminaron su presunto intento de ocupar ilegalmente una vivienda.
Según relata el Cuerpo Nacional de Policía en una nota de prensa, los hechos tuvieron lugar ya pasada la una del mediodía, cuando los agentes fueron comisionados por el teléfono de emergencias 091, tras recibir numerosas llamadas, a una calle de la barriada de La Chana, donde al parecer había una violenta reyerta entre varios individuos que se encontraban en el rellano de un portal.
Cuando los agentes llegaron al lugar se encontraron con cinco personas, mas un bebé de pocos meses, los cuales presentaban diversas lesiones como arañazos y erosiones, discutiendo en un rellano cubierto de cristales. Dos de las víctimas constituían un matrimonio que acompañaba al empleado de una agencia inmobiliaria para ver un piso de ese portal.
Estas personas, al llegar a la altura de la segunda planta, se encontraron con un individuo marroquí que estaba manipulando la cerradura de la puerta de entrada, presuponiendo que su intención era ocupar dicha vivienda. Es por esto por lo que, junto al empleado, le han recriminado su conducta, respondiendo el ahora detenido de forma violenta y causándoles arañazos, contusiones y erosiones.
Seguidamente, el agresor llamó al segundo detenido para que subiera, ya que ambos viven en el piso inferior, el cual aparece esgrimiendo un destornillador, manifestando su intención de agredirles, mientras les amenazaba de muerte al mismo tiempo.
Los agentes de policía, tras detener a los dos presuntos autores, comprobaron que ambos tenían antecedentes policiales y ninguno de ellos poseía permiso de residencia legal en España, encontrándose ambos en situación de estancia irregular. De hecho, uno de ellos tenía notificado desde el año pasado un decreto de expulsión por cinco años. De todo lo actuado se ha dado cuenta a la autoridad judicial.
