La Xunta restringirá reuniones y pedirá pruebas para entrar en hostelería

La Xunta va a restringir las reuniones entre no convivientes y pedirá una prueba negativa de covid-19 o el certificado de vacunación para entrar en los locales de hostelería de los municipios en nivel máximo o alto, un total de 36, en los que hasta ahora estos locales no podían usar el interior.

La primera de las medidas implica la prohibición de reuniones en el ámbito privado de más de 6 personas no convivientes en el interior y de más de 10 en el exterior y también, sea cual sea el número, entre las 3 y las 6 de la mañana en la calle, con carácter general.

Esta medida está pendiente de la autorización por parte del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), órgano al que la Xunta remitirá el documento para que puedan entrar en vigor en cuanto reciban el visto bueno, en 48 o 72 horas.

Así lo ha anunciado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, tras la reunión del comité clínico que ha decidido elevar al nivel máximo a los municipios de O Barco, Cambados, A Pobra, Boiro, Sanxenxo, Meaño y O Grove y situar a otros 29 en nivel alto, entre ellos las ciudades de Ourense, Vigo y Pontevedra.

En estos municipios se permitirá -a partir de las 0 horas del sábado, 24 de julio- abrir la hostelería tanto en interior como en exterior, con distintos aforos, aunque se exigirá una prueba para ir al interior.

Sin embargo, no podrá haber reuniones en la calle de no convivientes entre la 1 y las 6 de las mañana.

Además, se eliminará el cierre perimetral que hasta ahora se establecía para los municipios en nivel máximo.

Núñez Feijóo también ha anunciado que se adelanta la vacunación a la semana que viene de los menores de 30 años, que estaba prevista para el 9 de agosto, aunque ha lanzado duras críticas al Gobierno por la "falta de vacunas", lo que ha calificado como "el principal problema" en estos momentos.

Ha asegurado que, de tener vacunas, Galicia podría tener inmunizada al "cien por cien" de la población mayor de 12 años en agosto, pero "lamentablemente esto no va a ocurrir, de seguir así, hasta el mes de octubre o noviembre".

Por eso, ha vuelto a pedir disculpas a los más jóvenes por esta "discriminación imposible", pero ha insistido en que la situación epidemiológica es "mala" y ha justificado que las medidas adoptadas por el comité clínico se centran en aquellos que tienen más riegos de contagiar, que son los menores de 40 años.

El presidente gallego ha advertido de que los datos son "realmente preocupantes" y que en los últimos siete días el 80 % de los contagios es de personas de menos de esta edad.

Ha destacado que, aunque de momento esta situación no se está trasladando a los hospitales, de seguir así -con una incidencia de 1.000 contagios por cada cien mil habitantes entre los 12 y los 29 años- en la segunda semana de agosto se podría llegar "a un pico de 1.000 hospitalizados y 200 en UCI".

En la actualidad hay 174 personas ingresadas por covid-19, 153 en planta y 21 pacientes en unidades de críticos.

La Xunta ha optado por "actuar donde se producen los contagios", que son las reuniones de ámbito privado, ha incidido el presidente gallego, y no por "castigar de nuevo" a la hostelería con un cierre automático al subir los municipios de nivel de restricciones.

Por eso, ha cambiado las condiciones de cada nivel, de manera que el máximo ya no exigirá el cierre perimetral de los municipios y de la hostelería, sino que estos locales podrán abrir un 30 % en el interior y un 50 % en terraza; mientras que en el nivel alto, los porcentajes de aforo serán del 50 % en los dos ámbitos.

Para acceder al interior de estos locales se exigirá, a todos los mayores de 12 años, una prueba diagnóstica negativa dentro de las 72 hora anteriores o un certificado de vacunación o de haber pasado la covid-19, al igual que se hace ahora en el ocio nocturno, que solo podrá abrir en municipios en nivel medio o medio bajo.

Núñez Feijóo cree que hay "base legal" para exigir estos certificados, algo que ha puesto en duda la ministra de Sanidad, Carolina Darias, porque se expide "de manera automática" tanto en el caso de vacunación como de PCR, si bien "aún queda" estudiar cómo se va a facilitar desde la farmacia en el caso del test de antígenos que pueden vender desde este miércoles.

En cuanto a las restricciones para las reuniones, entrarán en vigor en cuando lo autorice el TSXG, al que la Xunta prevé remitir hoy mismo la solicitud con la "fundamentación adecuada" para que no haya "riesgo", como en otras comunidades autónomas, de no tener el visto bueno de los jueces, que podrían resolver en un plazo de entre 48 o 72 horas.