Alfonso Cabello era un nombre ligado a la historia del deporte cordobés desde hace años. En los Juegos Paralímpicos de Tokio ha conseguido dar un paso más y engrandecer su leyenda. En una soberbia carrera sobre el velódromo de Izu, el ciclista rambleño se ha colgado la medalla de oro en la prueba del kilómetro contrarreloj con una marca de 1:01:557 que le ha servido para superar el récord del mundo que él mismo tenía desde el año 2014.
Nuevamente ha justificado en la pista que es el mejor en la modalidad, ya que siendo el último en tomar la salida se sobrepuso a rivales como el británico Cundy (vigente campeón paralímpico) o el eslovaco Josef Metelka. De hecho, aventajó a éstos en 290 milésimas y en 3 segundos y 229 milésimas respectivamente. Los tres, incluyendo a Cabello, se subieron al podio de Río 2016 pero en distintos puestos del cajón.
El ciclista, tras realizar la mejor carrera de su vida, expresó sentirse "en una nube". "He trabajado durante unos meses muy duros y estar aquí y conseguir el oro es un sueño hecho realidad", señaló dando muestras del esfuerzo realizado reconociendo que el rendimiento de los principales candidatos a colgarse el oro le dieron el acicate definitivo para triunfar en el Lejano Oriente.
Cabello ahora tendrá unas horas para descansar antes de competir en la prueba de velocidad por equipos junto a Ricardo Ten y Pablo Jaramillo (este sábado); así como el 3 de septiembre en la etapa de ciclismo en ruta.