En la noche de este viernes, 17, arrancaba la edición de la feria de San Mateo más limitada, contenida, sencilla y controlada, y al mismo tiempo, la más anhelada y echada de menos. Con el imprescindible desfile de Gigantes y Cabezudos, acompañados por la Asociación Musical Pep Ventura, con el habitual pasacalles desde la Plaza del Ayuntamiento hasta el ferial, se abrían unas fiestas que se reciben con mucha ilusión en la localidad. Posteriormente tenía lugar el encendido que daba el pistoletazo de salida.
El lunes 20 será festivo local y el martes 21 el Día del Niño, con precio de 1,5€ el viaje. Además, esta edición contará con dos días de horario sin ruido, el viernes 17 y lunes 20, en la franja de 18:00 a 19:00 horas. El horario de hostelería y atracciones será hasta las 02:00 horas, con cierre de todo el recinto a las 02:30 horas.
Ya en su día, el edil de Festejos, Juan Manuel Marchal, remarcó que “hemos intentado hacer una feria de máximos, adaptándonos todo lo que hemos podido a la situación. Ya la feria de junio tuvo una gran aceptación y nula repercusión Covid, y con esta experiencia hemos intentado ampliar lo máximo posible, aunque siempre velando por la máxima prevención. Esta edición el Ferial será un recinto acotado, para vigilar aforo y personas en recinto. El punto de acceso será la puerta central de la portada, sirviendo las laterales como salida. En la portada se instalará un sistema de conteo de personas mediante cámaras y que se mostrará en una pantalla en la entrada, para que se sepa en todo momento las personas que están en el recinto. Habrá servicio de vigilancia y control de entrada”.
La primera mitad del recinto estará ocupada por cuatro casetas-terraza, compartiendo espacio con los tradicionales puestos de alimentación, ocio y diversión, y cada uno dispondrá de parcelas de 600 metros cuadrados, 300 techados y 300 al aire libre. Las parcelas de la zona sur, se destinarán a las 14 atracciones y a la habitual zona de venta ambulante, mientras que las caravanas y autocaravanas de los feriantes se ubicarán en las instalaciones de la empresa Alcalá Camper Park, en lugar de en la Avenida de Andalucía, para contribuir a la seguridad vial y ornato de la zona.
El primer edil ha remarcado que “se ha procurado cuidar al máximo todas las cuestiones referentes a la seguridad, el recinto ferial será vallado perimetralmente y las casetas tendrán su propio vallado, además se instalará un sistema de conteo de personas mediante cámaras y que se mostrará en una pantalla a la entrada, habiendo control de entrada y vigilancia”.
