La normalidad impera en el instituto de Isla Cristina donde la madre de un menor avisó vía burofax al centro antes del comienzo del curso de que su hijo acudiría sin mascarilla a clase. No obstante, según han informado a Europa Press desde la Delegación de Educación, todos los alumnos han ido al aula con la correspondiente mascarilla.
Hay que recordar que, ante este aviso de la madre, la Delegación decidió dar traslado a la asesoría jurídica para abordar esta situación, de manera que lo que se contemplaba era permitirle la entrada sin mascarilla, darle una en el centro y apartarlo de sus compañeros, de manera que no pusiera en riesgo la salud de otros ni la de sí mismo. En concreto, el planteamiento era que fuera a una sala aparte y fuera atendido por el profesor de guardia del centro onubense.
Desde la Delegación indicaron que el hecho de ser atendido fuera del contexto normal de clase, es decir, tener que ser apartado conlleva un parte disciplinario que, si se acumula en el tiempo, puede derivar en expulsión de uno a tres días, de tres a siete y hasta 21 e incluso el cambio de centro escolar. Por ello, incidieron en la importancia de cumplir las normas sanitarias.