La mejora de la formación y capacitación del capital humano es una de las claves para que la recuperación económica tras la pandemia sea sostenible y sostenida en el tiempo, en un momento en el que se van a recibir 140.000 millones de los fondos Next Generation que tienen varios ejes de trabajo: la digitalización, la productividad y la unidad de acción.
Esta es una de las principales conclusiones de la mesa sobre las empresas dentro del encuentro "Diálogos sobre el futuro" que se ha celebrado en Sevilla con la participación de la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, quien ha recogido el guante del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que le demandaba una reforma integral de la formación profesional para adaptarla al reto de la digitalización. La vicepresidenta le ha adelantado a Garamendi que en breve se abrirá un foro de debate para profundizar en la reforma de la formación profesional y en la capacitación digital de los jóvenes, “porque el plan de recuperación es para los jóvenes”.
España recibirá de los fondos Next Generation 140.000 euros hasta 2026, de los que ya han llegado 90.000 y 10.000 en los próximos meses, y el 40% se destinarán a proyectos de transformación verde, 30% a la transformación digital y el resto a la transformación digital e inclusión, según Calviño, que puso especial énfasis en la digitalización, además de aumentar la productividad y la fortaleza de las pymes.
“Tenemos el viento a favor pero no podemos controlar la intensidad ni que venga racheado, hay que orientar bien las velas y marcar el rumbo”, aseguraba la vicepresidenta, que también reconocía la “maraña” que han supuesto los numerosos requisitos para acceder a los fondos y que se busca agilizar la administración pública para “eliminar los cuellos de botella”. Calviño explicó que el plan busca innovar y digitalizar los procedimientos, que haya coordinación con las comunidades autónomas y ayuntamientos, y más control de los fondos pero con un seguimiento ágil de la ejecución, aunque puntualizó: “Es importante no dispersarse”.
Garamendi, que se adelantó a poner en valor el diálogo social “incluso cuando decimos que no”, en referencia a la subida del SMI, consideró que las claves del futuro de la empresa están en la internacionalización, la digitalización y la sostenibilidad, aunque el primer reto está en esa reforma de la formación para aumentar la productividad y la eficiencia, y en la unidad de acción, especialmente en sectores claves que se enfrentan a una gran transformación, como la automoción.
El presidente de la patronal también destacó la importancia de la responsabilidad sociales de esas grandes empresas tractoras, alrededor de las que se mueven infinidad de pymes, para que tiren de ellas, y animó a detectar y apoyar el “talento impresionante” que hay en España. “Que salga adelante el genio”, espetó, y ante la huida de talentos reflexionó: “Que se vayan pero que vuelvan”
Sobre los fondos Nexte Generation, apuntó que, con la apuesta por la reforma de la administración o la digitalización de la economía, las empresas podrán optar a esos fondos a través de los concursos, pero otras se articularán a través del programa Perte (proyectos estratégicos), que son globales y transversales, en las que las empresas tractoras deben tirar de las pymes. “Con los coches eléctricos, habrá baterías eléctricas, habrá que montar una fábrica”, apuntó antes de recordar que de cada euro que ponga Europa, cuatro son de la iniciativa privada.
Por su parte, Xavier Vives, profesor de Economía y Finanzas del IESE, incidió en la realidad dual de nuestra economía, muy competitiva e internalizada, pero con unas pymes a las que se necesita que la “lluvia fina” de esos fondos europeos “penetre”, siendo clave la reforma del sistema educativo y universitario. Vives se lamentó de que nunca se terminan de implementar las reformas necesarias para romper la inercia y apostó por buscar cómo compensar a los perjudicados.