Duro comunicado del Partido Socialista de Alcalá en relación con la no inclusión de la fiesta medieval dentro de la programación cultural de este verano. “Alcalá la Real no contará con su tradicional fiesta medieval. El gobierno del Partido Popular ha decidido que esta manifestación tradicional y muestra de actividades locales desaparezca de la programación”. El Partido Socialista se pregunta qué razones se esconden tras esta persecución.
La portavoz del grupo municipal socialista, Elena Víboras, ha lamentado que la coalición de gobierno capitaneada por Peñalver “haya decidido la supresión de la fiesta medieval con el peregrino argumento de los daños que se ocasionan al monumento. La esencia de la fiesta medieval ha sido en todas sus ediciones el redescubrimiento de la Fortaleza de La Mota por parte del público local, y ha contado siempre con un objetivo precisamente de protección del entorno, al limitar el aforo y separar los espacios con esa finalidad”.
Es “una fiesta pensada desde su origen para el disfrute del pueblo alcalaíno, para rememorar su historia evocando la vida del monumento más emblemático de nuestra ciudad”, según Elena Víboras, que además señala que se trata de “una fiesta muy popular entre los alcalaínos y necesaria para proyectar el trabajo de nuestros artesanos, como ceramistas, vidrieros, peleteros, aceiteros, viticultores…”.
“La realidad es que el Partido Popular se ha empeñado en eliminar toda huella de los anteriores gobiernos socialistas, que siempre lideraron y apostaron por esta manifestación desde su puesta en marcha. En ella se incluyeron actividades verdaderamente interesantes, respaldadas por el público, como demuestra la afluencia masiva pero ordenada de personas a La Mota y la siempre creciente demanda de instalación de tiendas en el zoco. Y en su afán por eliminar esa huella socialista, el gobierno de Peñalver a quien perjudica es a toda la ciudadanía”.
“Ya lo intentó con Etnosur –continúa el comunicado del PSOE de Alcalá–, recibiendo la presión social mayoritaria y reconduciendo su postura hacia lo que el pueblo y el público del festival demanda. La fiesta medieval es su próxima víctima y la pregunta es qué interés puede tener un gobierno local en eliminar actividades requeridas y seguidas de forma evidente, aportando para ello falsas excusas, dado que siempre se mimó ante todo el entorno y su protección. Otro signo de incompetencia, y una muestra de que el gobierno local se ve continuamente superado e incapaz de gestionar ni un solo evento con sus propios recursos, en un momento tan crucial como este, justo cuando la pandemia ha obligado a nuestro destino turístico a tener un parón de dos años”, concluyen los socialistas.
