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Viernes 08/11/2024
 

Alcalá la Real

Alcalá Suma y Corazones Verdes ponen en marcha iniciativa para reducir uso de plástico

Voluntarios acuden a puestos de fruta y verdura del mercadillo con sus propias bolsas reutilizables para que tenderos no les dispensen así bolsas de plástico

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  • Participantes en la iniciativa.

Voluntarios de Alcalá Suma y Corazones Verdes ponían en marcha este martes, en el mercadillo, una iniciativa con la que se va a tratar de concienciar sobre la necesidad de reducir el uso de plástico. De este modo, los participantes han pedido a los tenderos que les “echasen la fruta y verdura directamente en nuestras bolsas reutilizables de tela sin bolsas de plástico, ya que reciclar es importante, pero reducir lo es aún más”.

Desde Alcalá Suma, Salvador Corrales ha recordado que “llevamos ya bastante tiempo quedando por la mañana para recoger basura de los caminos y los arcenes, lo cual es una verdadera lacra, y con ello intentamos concienciar de que no se arroje basura de distinto tipo, sobre todo plástico por las ventanillas de los coches, y ahora, la idea de esta otra iniciativa que hemos llevado a cabo en el mercadillo, además de fomentar el comercio local y favorecer a los pequeños productores lo que pretende precisamente es reducir el uso del plástico. Hace semanas que lleva habiendo quejas de que en el mercadillo se acumula mucho plástico y hemos pensado que una de las formas de reducirlo es que tanto el productor como los consumidores llevemos nuestra propia bolsa de tela para que puedan servirnos la fruta en ella. Sabemos, además, que las clásicas bolsas de plástico son muy volátiles y se esparcen con facilidad por el viento cuando se colocan en las papeleras de la localidad”.

Corrales también ha apuntado a las grandes superficies que, en algunas ocasiones, incluso venden ya la fruta troceada y plastificada. “De esto tienen la culpa para empezar las leyes, luego las propias grandes superficies, algunas de las cuales si se mueven, y por supuesto el consumidor que debe cambiar el chip. El problema es la falta de tiempo y la comodidad de ir a una gran superficie y hacer la compra entera. Hay que volver a ir a las tiendas de barrio, donde venden fruta y verdura, carne, pescado, y es mucho más fácil ir con nuestra propia bolsa de la compra. A través de esta iniciativa cívica, si hay cinco, diez o veinte personas que tomen ejemplo, algo se habrá conseguido, puesto que estas conseguirán influir en otras tantas, y así concienciar sobre la necesidad no solo de reutilizar sino, sobre todo, de reducir”.


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