El Ayuntamiento de Tomares ha puesto en funcionamiento los nuevos contenedores marrones para biorresiduos, reafirmando su compromiso con el medio ambiente y la sostenibilidad. Este proyecto forma parte de una estrategia integral para promover la economía circular y convertir al municipio en un referente en prácticas ambientales responsables.
Los nuevos contenedores marrones, 72 en total, están diseñados específicamente para la recogida de residuos orgánicos de origen vegetal o animal que puedan descomponerse de manera natural. Estos desechos, una vez recolectados, serán transformados en compost o biogás, lo que permitirá mejorar la calidad del suelo, aumentar las tasas de reciclaje y reducir la cantidad de residuos enviados a vertederos. Además, esta iniciativa contribuirá a la disminución de emisiones de gases de efecto invernadero, avanzando en la lucha contra el cambio climático.
Según el Gobierno local, este proyecto “modernizará la infraestructura existente, mejorará la eficiencia en la recogida de residuos orgánicos y fomentará una correcta separación de los mismos en los hogares”. La instalación de los contenedores representa un paso significativo hacia un modelo de gestión de residuos más sostenible y eficiente, aseguraron en una nota oficial.
Los contenedores marrones están diseñados para recibir desechos orgánicos específicos, como restos de alimentos crudos o cocinados (carne, pescado, frutas, verduras, pastas o arroces), flores y plantas, posos de café y bolsitas de té, cáscaras de huevo, mariscos y conchas, entre otros. También pueden depositarse productos impregnados con materia orgánica como servilletas usadas, papel de cocina o hueveras de cartón sucias.
El Ayuntamiento ha señalado que es imprescindible el uso de bolsas biodegradables o compostables para depositar los residuos, ya que estas se degradan junto con la materia orgánica, facilitando el proceso de compostaje. En cambio, las bolsas de plástico dificultan este proceso y, por tanto, no deben emplearse.
Para garantizar una gestión eficiente, los contenedores cuentan con un sistema de apertura electrónica mediante una tarjeta con chip y tecnología RFID. Este sistema permite abrir el contenedor acercando la tarjeta a la cerradura, lo que elimina la necesidad de contacto directo, mejora la higiene y optimiza el procesamiento de los residuos. Durante el periodo inicial de prueba, los contenedores estarán abiertos sin necesidad de tarjeta, pero una vez finalizado este periodo será obligatoria.
Los ciudadanos interesados en obtener la tarjeta electrónica pueden solicitarla enviando un correo con sus datos de contacto a la Delegación de Medioambiente del Ayuntamiento (medioambiente@tomares.es).
Un proyecto financiado por fondos europeos
El proyecto de los contenedores marrones cuenta con financiación de la Unión Europea a través de los Fondos NextGenerationEU, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y la Junta de Andalucía.
Con la incorporación del contenedor marrón, Tomares suma un quinto tipo de contenedor a su sistema de reciclaje, que ya incluye el gris para restos, el azul para papel y cartón, el amarillo para envases ligeros y plástico, y el verde para vidrio.
Esta medida refuerza el compromiso del Ayuntamiento con la sostenibilidad, posicionando a Tomares como líder en la adopción de prácticas ambientales innovadoras y sostenibles. “Es una importante medida que contribuirá a convertir a Tomares en un referente de la economía circular y un modelo de eficiencia y responsabilidad ambiental”, han destacado desde el Gobierno local.
