La retirada del escudo franquista que corona la entrada principal de la Escuela de Arte 'Carlos Pérez Siquier' de Almería conforme a la nueva Ley de Memoria Democrática que entró en vigor el pasado mes de octubre aún tendrá que esperar después de que la Junta de Andalucía haya decidido incluir esta actuación, que ya contaba con un proyecto propio e incluso con obras adjudicadas en septiembre de 2019, en una intervención "integral" del centro educativo que aún se encuentra en fase de elaboración.

La Consejería de Desarrollo Educativo de la Junta de Andalucía decidió el pasado mes de marzo desistir de las obras que se adjudicaron a la empresa Rehabitec Almería hace más de cuatro años por un importe de casi 17.000 euros y que tenían como plazo de ejecución un mes, condicionado su inicio a la obtención de la licencia municipal.

El motivo principal de este desistimiento radica en la actuación "integral" que la Dirección General de Planificación y Centros pretende hacer en el centro educativo situado en la plaza Pablo Cazard y que se incluyó en el Plan de Infraestructuras Educativas de 2022 presentado el pasado mes de enero, según han indicado a Europa Press fuentes del Gobierno andaluz.

En concreto, la actuación estima una partida de 1.350.000 euros para acometer la obra global de la escuela. No obstante, por el momento no hay una fecha estimada para llevar a cabo dichas obras ya que, incluso, aún están por definir cuáles son los déficits que presenta el inmueble y, con ello, determinar qué mejoras se va a realizar en el inmueble.

En este sentido, desde la Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE) reconocen que, de cara a materializar la actuación, todavía se trabaja en la elaboración de un programa de necesidades, el cual habría comenzado a prepararse hace, al menos, un año con la inspección de las instalaciones.

Asimismo, desde el órgano educativo han apuntado las dificultades que entraña la actuación en el inmueble, no solo por la categoría de Bien de Interés Cultural (BIC) que ostenta y que restringe las actuaciones, sino porque además contiene diversos talleres con maquinaria específica para el desempeño de sus ciclos formativos --cerámica, escultura, fotografía, grabado, ilustración, modelismo de indumentaria, mobiliario-- y enseñanzas superiores, así como un Bachillerato de Artes.

A estas cuestiones específicas se unen otras relacionadas con el estado en sí del inmueble, para el que se han pedido mejoras en la climatización, la accesibilidad, la instalación eléctrica o el estado general de la cubierta; cuestiones que aún no han sido resueltas desde Desarrollo Educativo para poder avanzar en la licitación y adjudicación de la redacción del proyecto con el que poder realizar con posterioridad las obras.

Durante la pasada legislatura la retirada del escudo franquista tampoco llegó a recibir el visto bueno de la Comisión Provincial de Patrimonio, que dejó aparcado el asunto después de solicitar el asesoramiento del Comisionado para la Concordia de la Junta de Andalucía ante las "discrepancias" surgidas entre los vocales del ente.

Según Cultura, era preciso que la Comisión diera el visto bueno a la retirada del escudo debido a que este se incrusta sobre la fachada de un edificio declarado bien de interés cultural (BIC). Del mismo modo, se alegó la necesidad de contar con la nueva orden sobre actos y símbolos contrarios a la memoria democrática en la que trabajaba la anterior Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico.

Fue en febrero de 2019 cuando se adjudicó al arquitecto Luis J. González el proyecto, que sería validado cinco meses después, a fin de agilizar la retirada del símbolo. La actuación se inició por primera vez hace ocho años a petición de la Delegación Territorial de Educación en cumplimiento de la Ley 2/2017, de 28 de Marzo, de la Memoria Histórica y Democrática de Andalucía.

La actuación propuesta contemplaba las gestiones y actuaciones para la retirada de un escudo mediante extracción, relleno del volumen extraído según lo prescrito en el proyecto aprobado, embalaje y traslado al lugar designado para su conservación.

La retirada de este símbolo se planteó al mismo tiempo que la que se realizó en 2015, cuando la Junta de Andalucía retiró el escudo del águila de San Juan que presidía la entrada del colegio público 'Celia Viñas' de Almería. La retirada del símbolo franquista permitió devolver el forjado de la entrada a su estado original, ya que dicho elemento había sido incluido con posterioridad.