Se ganó su confianza para intercambiar imágenes de carácter sexual y mantener un encuentro sexual con él en Almería
La Policía Nacional ha detenido en Barcelona a un joven de 23 años acusado de agredir sexualmente a un menor de 14 años con quien contactó a través de un videojuego y se ganó su confianza para intercambiar imágenes de carácter sexual y mantener un encuentro sexual con él en Almería.
Según ha informado este viernes la Policía, en el registro en el domicilio del detenido los agentes localizaron numeroso material pedófilo en su ordenador, que está pendiente de analizar para determinar si puede haber otras víctimas.
El detenido contactó con el menor a través de un videojuego y se ganó su confianza, de forma que las conversaciones fueron cada vez más íntimas, hasta el punto que supuestamente llegaron a intercambiar imágenes de carácter sexual a través de las redes sociales y aplicaciones de mensajería.
El acusado, que también le realizó varios regalos para ganarse su confianza, le solicitó mantener relaciones sexuales pese a saber que tenía 14 años, por lo que, según la Policía, finalmente se produjo un encuentro sexual entre ambos en un hotel de Almería, al que se desplazó el detenido tras recorrer más de 800 kilómetros desde Barcelona.
Según la Policía, cuando el menor denunció los hechos en una comisaría de Almería, a mediados de febrero pasado, el detenido le hizo chantaje emocional y le amenazó para que no le incriminara.
De hecho, según la Policía, el supuesto agresor amenazó al adolescente con denunciarle por haberse aprovechado de una persona con discapacidad, dando a entender que tenía algún tipo de discapacidad, y además, tras obtener el contacto de la madre y el hermano de la víctima, se puso en contacto con ellos con el mismo objetivo.
Sin embargo, los agentes abrieron una investigación, tras comprobar que en el teléfono móvil del menor había numerosas pruebas gráficas que corroboraban su testimonio, por lo que a principios de marzo identificaron al sospechoso, le detuvieron y registraron su domicilio, donde localizaron numerosos dispositivos digitales con información relevante para la investigación.
Con el apoyo de la Unidad Central de Ciberdelincuencia, los policías obtuvieron indicios de hechos denunciados por el menor como también de otros delitos, como el de posesión de pornografía infantil, ya que en su ordenador localizaron numeroso material pedófilo.
Los agentes están pendientes ahora de analizar estas imágenes y el contenido de siete discos duros y un teléfono móvil, entre otros, para determinar si el arrestado pudo haber cometido delitos parecidos con otras víctimas.