El empresario de Roquetas de Mar (Almería) acusado de intentar matar en enero de 2013 a su vecino asestándole una cuchillada en el cuello ha aceptado tres años y nueve meses de prisión tras rebajar el fiscal la pena de nueve años de cárcel que interesaba provisionalmente por un delito de homicidio en grado de tentativa.
El Ministerio Público ha modificado su calificación de los hechos y ha estimado que concurren las atenuantes de embriaguez y de confesión, por lo que J.F.S.V., en prisión provisional, ha mostrado conformidad con la condena con anterioridad a la vista oral señalada cuyo arranque estaba señalado este jueves ante el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial.
El otro acusado, J.G.Q., cuñado del primero y a quien se imputaba la comisión de un presunto delito de encubrimiento ya que se deshizo del arma usada en el ataque tirándola a un contenedor, ha aceptado seis meses de prisión frente a los 15 meses de carcel que la Fiscalía solicitaba de manera provisional, según han indicado a Europa Press fuentes jurídicas.
J.F.S.V. y la víctima, vecinos en un edificio de apartamentos de Aguadulce, mantuvieron un altercado en la madrugada del 28 de enero en un local ubicado en el centro comercial neptuno y regentado por el primero.
A las 05,00 horas, el procesado se dirigió a casa de la víctima y, cuando ambos se encontraron en el rellano de la escalera, sacó del bolsillo un cuchillo de cocina de ocho centímetros de hoja con el que intentó "asestarle varias puñaladas hasta que finalmente le alcanzó en el cuello".
El hombre sufrió una herida inciso contusa de tres centímetros en el cuello, que le afectó a la vena yugular y le puso en "compromiso vital", por lo que precisó una intervención quirúrgica de urgencia para salvar la vida. Estuvo hospitalizado tres días, de los que tardó 25 en curar y le ha quedado una cicatriz de ocho centímetros.
El otro acusado, J.G.Q., cuando vio llegar a su cuñado de nuevo a la discoteca con el cuchillo "en la mano manchado de sangre", cogió el arma y la tiró a un contenedor de basura ya que era "conocedor" de la pelea y quería "evitar a J.F.S.V. los problemas que pudiera tener con las autoridades policiales y judiciales".
