Maestro en las artes pictóricas, de reconocido prestigio nacional e internacional, con su propia galería de Arte en Miami, se le atribuye la creación y la escuela del arte subacuático y el arte orgánico.
Niño prodigio, ya que se conservan obras suyas creadas con tan solo 6 años de edad. Nacido en Almuñécar. Desde muy joven se hizo buzo para poder investigar a fondo los mares y de esa manera poder apreciar y capturar la belleza de los paisajes submarinos. Su obra de arte presenta imágenes de un mundo de ensueño, de belleza y poesía. Se trata de un nuevo mundo que era prácticamente desconocido para el público. Antonio Domínguez de Haro plasma en sus lienzos el misterio de los mares. A sus 93 años, vive en Almuñécar, frente al mar, del que se inspira cada día para seguir pintando.
Entre el color la textura y los efectos visuales que caracterizan tus obras ¿Dónde está Almuñécar?
- ¡Almuñécar! (sonríe melancólico) para mí es mi vida, mi inspiración, es mi pueblo donde nací y donde conservo muchísima familia, amigos y conocidos de todas mis vivencias en esta vida. Es mi fuente de inspiración, donde pegué mis primeras pinceladas que ya ni recuerdo, donde me enamoré de su mar de sus hermosos colores, de su magia y ese azul que se quedó grabado para los restos en mi mente. A lo largo de mi vida he dejado plasmado en mis obras los fondos de las playas de Cabria, del Eucalipto, del Tesorillo, las rocas de Curumbico. Aquellos colores que existían entre velilla y el paseo del Altillo, cuando no había acceso desde Almuñécar hacia velilla, a no ser que fueras por la montaña, de nuestros hermosos peñones, el santo el del medio y el de afuera. Recuerdo sus corrientes, sus tonos, su belleza, y así podría seguir hasta la cueva de las Palomas, los Berengueles, obviamente pasando por Cotrobro y la playa del muerto, la Punta de la Mona, La Herradura… todos estos recuerdos están plasmados en mi mente en mi memoria y me acompañaron y acompañarán hasta mi último día.
Ahora sé a ciencia cierta que todos esos hermosos colores de mi infancia y adolescencia y hasta muy entrado ya en la treintena, ya han desaparecido, por eso los plasmo en lienzos para que los padres enseñen a sus hijos como era el fondo del mar de antaño, sin contaminación, sin pesca de arrastre, sin cientos de redes que se quedaron como trampas en nuestros fondos marinos, sin plásticos y basura, sin… (se calla y se queda triste meditando)… en fin amigo mío, ¿qué es Almuñécar para mí? Mi vida, he recorrido casi todo el mundo con mi obra y sabes, siempre he llevado con orgullo mi pueblo a todas partes. Cuando inauguramos mi galería de Arte en Miami, te puedo decir que en todas las entrevistas siempre procuré que para mis hijos, Almuñécar fuera tema de conversación, ya que ellos son los que actualmente me representan por el mundo. Creo que he añadido una migaja de pan para que en Estados Unidos y en muchos países y continentes del mundo se conozca mi pueblo. Podría estar hablándote horas, de sus hermosas calles, de sus aromas, y de su encantadora gente, pero en general esta es mi visión y mis sentimientos sobre mi amada Almuñécar.
Antonio, ¿óleo o acuarela?
- Oleo y acuarela, jamás he tenido preferencia por ninguno de los dos. Hay días que me apetece pintar con óleo y días que me apetece acuarela, tan sencillo como eso.
‘Un poeta en New York’ es una de las obras cumbres del granadino García Lorca. Ahora las pinturas de los fondos marinos de Antonio Domínguez de Haro triunfan al otro lado del charco en New York y Miami ¿Sientes ese reconocimiento que tienes allá, aquí en tu tierra?
- Jejeje se ríe. Sinceramente con todo el dolor de mi corazón, no lo siento, hoy en día se le da poco valor al mundo del arte, yo durante casi toda mi vida he viajado con mi obra por todas partes intentando representar el arte y la cultura de este nuestro viejo y culto país y poca atención he recibido por mi trabajo de instituciones y medios de difusión españoles y te digo esto no por mí solo, lo digo por esa cantidad de jóvenes artistas que no se le da apenas oportunidad en este país. Parece que ser docto en las artes plásticas y apreciar la belleza que se plasma en una obra de arte, no está de moda actualmente, una pena pero una realidad. A mi jamás me ha ido una cadena de Tv española a mi galería de Miami, ni siquiera cuando la inauguré, eso sí, cadenas de todo Estados Unidos y las revistas más prestigiosas estuvieron allí junto con personajes de renombre internacional, pero de España yo diría contando con los dedos de mis manos. Lo dicho, parece que no está bien visto que un español andaluz granadino y Almuñéquero represente a su gente con su humilde obra por el mundo, creo que te he dado mi respuesta amigo mío.
Tienes una galería-exposición permanente en Miami, cuéntanos tu experiencia en ultra mar.
- Bueno, mi galería se inauguró ya hace creo que seis años. Tiene capacidad para unas 20 a 25 obras mías y de considerable tamaño. Fueron mis hijos los que lucharon por conseguirla, en especial mi hija Isabel, que actualmente es la directora de la galería. Está situada en la zona centro, en la avenida Brickell, en el Hotel FourSeasons, en el loby del Hotel. La situación es muy estratégica y su acceso muy cómodo para el que la quiera visitar, entiendo que está lejos, pero me encantaría que todo el mundo y en especial mi gente de Almuñécar puedan visitar mi obra de allí, serán muy bienvenidos. La galería ha sido desde el primer día un autentico éxito, las criticas en prensa lo demuestran, y la aceptación por parte de los ciudadanos americanos y latinos es simplemente espectacular. Se ha llegado a barajar poner al museo oceanográfico mi nombre, cosa que dudo, pero quien sabe.
¿Dirías que el éxito de tus obras está en sacar de tu imaginación y de la experiencia de tantas inmersiones bajo el mar, esas imágenes que plasmas en tus lienzos o quizá en el juego de las pinceladas largas y cortas, donde el color juega un papel fundamental o en la armonía entre la técnica y el talento?
- Amigo mío, cuando era joven todas las pinceladas que daba eran producto de inmersiones y créeme, muchas inmersiones hacía para poder plasmar una obra. A raíz del accidente que tuve de tráfico, ya cerca de los 68 años tuve que dejar de bucear, ya que estuve en coma casi una semana y mis pulmones se quedaron bien jorobados, por lo que desde entonces todo lo que he pintado y sigo pintando es producto de mis sueños mezclado con mis recuerdos. Pero son tantos mis recuerdos que sinceramente a veces confundo mis sueños con mis recuerdos o mis recuerdos con mis sueños, porque a veces sueño que estoy buceando con pulpos y con sirenas, delfines y zafios, en fin, ¿son sueños o recuerdos? No lo sé.
En varias entrevistas hemos escuchado que el Ayuntamiento de Almuñécar tenía en proyecto un Museo y una Escuela Internacional de Arte Domínguez de Haro en tu honor. ¿Nos puedes adelantar algo de estos proyectos?
- Poco te puedo adelantar, de hecho nada, supongo que es por la dichosa política. Hace aproximadamente del orden de seis años me llamaron de la concejalía de Cultura para ofrecerme abrir mi museo en Almuñécar, me hicieron traer el fondo de obra para el museo que lo presente en la casa de la cultura, en la inauguración estuvieron todas la autoridades de Almuñécar. En fin, me llené de orgullo y de alegría aquel día, pero si quieres que te diga mi verdad, y con toda la pena del mundo te puedo decir que aquello se quedó allí. Sigo esperando que lo hagan. Sabes, esto crea mucha pena en este anciano, quizá es porque no he representado lo suficiente en el mundo entero a mi pueblo y tenía que haber pintado más, no lo sé, pero cuando se te prometen algo que para mí a mis 93 años de edad yo pueda ver en vida, y te hacen creértelo pienso que es cruel y poco justo.
Tus pinturas son una invitación para los que no han podido ver el fondo del mar se acerquen a él a través de tus obras pero, el mar está cambiando. La contaminación, el cambio climático, la pesca abusiva… hasta qué punto tu obra es también una llamada de atención y una reivindicación a las autoridades para preservación del medio ambiente.
- Bueno esto creo que ya te lo he comentado antes, recuerdo cuando me hicieron el homenaje en la ciudad de Motril, que presenté más de 70 obras, en la entrevista recuerdo que fui muy claro, mi obra no es actual, mis colores no son actuales, mi obra intenta reflejar aquel mar mediterráneo lleno de colores y de armonía, sin apenas contaminación y basura. Yo lo recuerdo muy bien, y pedí que los padres que aún lo recordaran les mostraran mis obras a sus hijos para que no se olviden, y con ello, quizá se cree una conciencia colectiva, que pueda hacer que se recuperen nuestros fondos marinos, fíjate que pasó con la pandemia, con el encierro se recuperaron los fondos muchísimo, si nuestros hijos y nietos se mentalizaran, podríamos conseguir volver a ver esos hermosos colores en nuestros fondos marinos de nuestro hermoso y antiguo pueblo sexitano de Almuñécar.
¿Qué papel juegan tus hijos en tu obra? Los vemos volcados en la promoción y en la difusión de tu obra. Te arropan, están a tu lado, te miman… y Celia?
- Pues como abuelo, padre, y marido, solo puedo decirte que son ellos los que cuidan de mí, me arropan y me miman, lo cierto es que no me puedo quejar, ellos están luchando por mi reconocimiento y mi puesto en el arte mundial, y con el apoyo de mi esposa Celia, que ahí ha estado más de 65 años a mi lado, que todo hay que decirlo, soy a mis 93 años un hombre pleno y orgulloso de su mujer, de sus hijos, sus nietos y su familia en general.
¿Cuáles son tus proyectos de futuro?
- Hay muchos proyectos la verdad, está Nueva York, esta como todos los años Art Basel en Miami, quizá algún proyecto se está cociendo por Europa, y por supuesto y esto lo tengo que decir, que cumplan con lo prometido en mi pueblo, y que lo cumplan estando yo en vida, el Museo Domínguez de Haro.
