La Consejería de Salud y el Servicio Andaluz de Salud participan como socios investigadores en un proyecto paneuropeo
La Consejería de Salud y el Servicio Andaluz de Salud (SAS) participan como socios investigadores en un proyecto paneuropeo cuyo principal objetivo es reducir la brecha digital en personas con discapacidad intelectual y favorecer su inclusión social.
Se trata de un estudio internacional que lidera la Universidad Trinity College de Dublín para mejorar la salud psicológica y emocional de este colectivo.
El reto es crear un programa educativo accesible a las personas con discapacidad intelectual leve y moderada para fomentar sus habilidades digitales.
Al programa se accederá a través de una aplicación, cuyo diseño será sencillo y accesible, según ha explicado este domingo la Junta en un comunicado, en el que detalla que el estudio cuenta con tres fases, que se desarrollarán del 3 de enero de 2022 al 31 de diciembre de 2024.
Las dos primeras se corresponden con el desarrollo de la herramienta digital y el programa educativo, mientras que la tercera se centra en su evaluación y validación.
Este trabajo tiene la aprobación del Comité de Ética del socio principal, la Universidad Trinity College de Dublín, que ya ha llevado a cabo las dos primeras fases y, actualmente, se plantea replicar estas fases en el Servicio Sanitario Público de Andalucía.
La investigación se llevará a cabo por un equipo compuesto por la Consejería de Salud y Familias y el Servicio Andaluz de Salud.
La Universidad Trinity College de Dublín lidera el proyecto a nivel internacional, en el que también participan Karolinska Institute, MADoPA (Centre Expert en Technologies et Services pour le Maintien en Autonomie à Domicile des Personnes Agées), Región de Estocolmo, Universidad Erasmo de Rotterdam y Universidad de Zagreb.
El programa Digi-ID, que cuenta con los apoyos del Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI Andalucía) y la Federación Andaluza de Asociaciones Síndrome de Down (Down Andalucía), ha conseguido la financiación de EIT Health, el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología.
En Europa, se calcula que alrededor de 8 millones de personas tienen discapacidad intelectual, que a menudo experimentan peores resultados en salud y bienestar debido a necesidades no atendidas.
La creciente dependencia en la sociedad actual de las tecnologías de la información y la comunicación está incrementando aún más las desigualdades, ya que estas personas carecen de habilidades digitales.