Las hermanas Purificación y Dolores García Caparrós han lamentado en los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en Carmona (Sevilla) que sus padres "se fueron sin saber por qué mataron a su hijo de esa manera" el cuatro de diciembre de 1977 y que "nos quedamos solas, nadie nos ayudó", por lo que se sienten como "víctimas de segunda".
Durante el primer día del curso 'Víctimas de la transición. Luchando contra el silencio y el olvido', Purificación y Dolores García Caparrós han expresado que desde aquel día, cuando se produjeron las manifestaciones en favor de la autonomía de Andalucía, "nuestra familia se hundió totalmente" y que su madre y su padre "no levantaron cabeza".
"Mi madre, a los dos años, falleció, mientras que mi padre luchó muchísimo para que se supiera la verdad, pero no hubo forma; todas las puertas se nos cerraban, cogimos a un abogado que hizo todo lo posible para que saliera a la luz quién fue y por qué lo hizo, pero no hubo manera, hasta el punto de que aún es secreto de sumario", han añadido.
Ambas mujeres, que por aquel entonces eran menores de edad, han recalcado que "hemos salido adelante por nosotras mismas" y que "hemos vivido prácticamente solas, esperando a que alguien viniera a decirnos si necesitábamos algo".
"A nuestra madre no le pusieron ni un psicólogo. Hay quien reconoce otras víctimas, pero las nuestras no las reconoce nadie, somos víctimas de segunda", han sentenciado.
SOBRE MANUEL JOSÉ GARCÍA CAPARRÓS
Durante la intervención, tanto Dolores como Purificación se han referido en los siguientes términos sobre su malogrado hermano: "Mi hermano era muy sindicalista, estaba afiliado a Comisiones Obreras y era un trabajador con 18 años. Lo único que quería era tener una vida más cómoda y honorable que la que teníamos los andaluces en aquellos años".
"Quería tener más libertad para comunicarse y hablar, sin que te parara la Policía si había una reunión de amigos en la calle", han comentado tras subrayar que "los andaluces queríamos tener más libertad".
"En aquella época no la teníamos y por eso salimos a la calle aquel cuatro de diciembre, ya que nos querían dar un Estatuto de Autonomía a su forma, la cual no queríamos los andaluces", han relatado las invitadas al curso.
UN MAYOR SENTIMIENTO ANDALUZ
Para Dolores y Purificación, el cambio en "el plan de autonomía hacia una plena, como la que tenían Cataluña o el País Vasco" fue lo único que se hizo tras la muerte de Manuel José: "Al principio, a Caparrós no se le nombraba en los cuatro de diciembre; de hecho el día de Andalucía lo cambiaron el primer año tras su muerte al 28 de febrero para que se olvidaran de él".
"Si lo miramos bien, sin el cuatro de diciembre no habría 28 de febrero; cuando hablan del 28 de febrero ya hablan también del cuatro de diciembre y de García Caparrós, pero antes estaba en el olvido total, como si hubiera sido solo una manifestación pacífica", han aseverado las hermanas.