Las urnas han dictado sentencia, haciendo Democracia una vez más. Los onubenses y las onubenses decidieron ayer de forma mayoritaria, aunque menos que en los comicios de 2007, que Pedro Rodríguez, el Partido Popular y trece de sus compañeros de viaje, gobiernen durante otros cuatro años la ciudad de Huelva. Le han hecho el encargo de que construyan, como el ha repetido en diversas ocasiones durante toda la campaña, “la Huelva del siglo XXI”. Pero este es sólo uno de los datos que arrojan los números de las vertiginosas elecciones municipales vividas ayer en Huelva, los otros destacados dicen que el PSOE se queda en nueve ediles, lo que supone la pérdida de un sillón en la Casa Grande de la Gran Vía; es el mismo número que gana Izquierda Unida Los Verdes Convocatoria por Andalucía, que se consolida al alza con Pedro Jiménez; por otro p`parte, y esto si constituye también un titular, la Mesa de la Ría, “la candidatura de la sociedad civil2 encabezada pro el arquitecto José Pablo Vázquez, consigue una representación, un edil que da muestra de la fragmentación que ha sufrido sobre todo, el voto más progresista

Más datos
También hay que poner en valor los datos que señalan cuantos electores se han acercado a depositar sus votos en las urnas. El índice de participación ha sido del 55,77%, tres puntos por encima que en los anteriores comicios.

Un dato que ha satisfecho en general a todos los contendientes. Otra cosa ha sido el baile de sensaciones según los porcentajes iban apareciendo en las pantallas de los ordenadores portátiles y de los modernos teléfonos móviles: el PSOE albergaba esperanzas con el 68,12 por ciento del escrutinio realizado, que otorgaba al PP 13 concejales, 10 para los socialistas, 3 a Izquierda Unida, y 1 para Mesa de la Ría, lo que abría la puerta a un posible pacto que arrebatara a Pedro Rodríguez la mayoría absoluta. Pero las tornas cambiaron pasadas las diez de la noche, cuando el 84% de los votos escrutados devolvían al PP la mayoría absoluta con un concejal menos (14), quitaban al PSOE otro concejal (9) daban 3 a Izquierda Unida y 1 a Mesa de la Ría, que irrumpía así en la política municipal con más de 5.000 votos obtenidos en la ciudad.

Los porcentajes
Los próximos días servirán para sacar a la luz los análisis más o menso concienzudos, y para poner sobre la mesa donde ha estado el acierto de los ganadores y donde los posibles errores de los que no han estado al nivel que esperaban, pero los datos son los que son y para la capital señalan que el Partido Popular de pedro Rodríguez, que gobernará por quinta vez consecutiva el Ayuntamiento de Huelva, ha obtenido un total de 28.428, lo que supone un porcentaje del 45,33% y un total de 14 concejales; sus números en 2007 fueron de 15 concejalas, para un total de 31.056 y un porcentaje de votos de 51,11%.

En el caso del PSOE los números de las elecciones de ayer son los siguientes: un total de 19.099 votos recibidos, para un porcentaje del 30,46% y un total de 9 ediles, lo que supone un descenso con respecto a las pasadas elecciones municipales cuando la candidatura de Manuela Parralo obtuvo 10 actas de concejal con un total de 22.424 y un porcentaje de 36,90%.

En el caso de Izquierda Unida Los Verdes Convocatoria por Andalucía, Pedro Jiménez, por contra de lo ocurrido con los socialistas y los populares, ha cotizado al alza, con lo siguientes resultados: 6.314 votos recibidos, con un porcentaje del 10,07% para un total de 3 concejales, uno más que hace cuatro año cuando sus números fueron de dos concejales tras obtener 4.477 votos totales y un porcentaje del 7,37%.

Hay una formación que entra por primera vez: surgida de los movimientos civiles por la mejora del medio ambiente en Huelva la Mesa de la Ría obtiene un acta de concejal después de haber cosechado un total de 3.364 votos de las ciudadanas y ciudadanos de Huelva y un porcentaje de sufragios recibidos de 5,36%.
Con estos resultados, las incógnitas de las ecuaciones planteadas durante la extensa precampaña y la intensa campaña ya tiene despejadas todas las magnitudes. ahora, toca vivir otros cuatro años de tira y afloja, de gobierno contra oposición, aunque eso sí, con muchos más colores de los que se tenían hasta ahora.