La Asociación Divergentes, creada en septiembre de este año, ha comenzado su andadura con un claro objetivo: promover la accesibilidad y la inclusión en Bormujos, trabajando por un municipio más adaptado a las necesidades de todas las personas, especialmente aquellas con diferentes capacidades o en riesgo de exclusión social. María Ángeles Salgueiro y Emilio Díez, secretaria y vicepresidente de la asociación, han compartido los primeros pasos y los retos de esta nueva iniciativa.
“La asociación llevaba años gestándose, sobre todo a raíz de un problema de salud que enfrentó Emilio, durante el cual pasó mucho tiempo en silla de ruedas y pudo observar las numerosas barreras existentes en Bormujos”, explica Silgueiro. A partir de ahí, comenzaron a investigar y entablar contacto con la Concejalía de Urbanismo, manteniendo una relación de colaboración para proponer mejoras en la localidad.
Uno de los primeros proyectos de Divergentes ha sido la presentación de alegaciones a la ordenanza de espacios públicos, buscando garantizar mayores espacios libres en las calles y evitar obstáculos como el mobiliario de terrazas en las aceras. Sin embargo, como señala Díez, “de todas las alegaciones, la mayoría fueron desestimadas”.
Además, Divergentes ha alzado la voz para
denunciar la falta de accesibilidad en el parque de La Alquería. “El mobiliario urbano no cumple con las normas de accesibilidad. Por ejemplo, no hay bancos con respaldos y reposabrazos”, comenta el presidente, quien añade que la asociación ha iniciado una campaña en redes sociales para sensibilizar a los vecinos sobre este problema. También han solicitado una reunión con la delegada de Parques y Jardines para abordar estas cuestiones y proponer soluciones.
A pesar de los retos, desde la asociación reconocen que el Ayuntamiento ha mostrado disposición para escuchar sus propuestas.
“Nos atienden siempre, eso hay que decirlo. Hemos presentado solicitudes y tenemos confianza en que cuando hablemos, se podrán resolver muchos temas”, asegura Díez.
Por otro lado, Divergentes también aplaude los avances que el consistorio está realizando en materia de accesibilidad, como la adaptación de itinerarios accesibles para personas con movilidad reducida. No obstante, subrayan que estas adaptaciones deben ser inclusivas para todas las personas con diferentes capacidades. “Si no son accesibles para todas, no son accesibles de verdad”, matiza Díez.
Divergentes, desde su reciente creación, ha demostrado ser una voz firme en la lucha por una Bormujos más inclusiva.
“Estamos aquí para ayudar y para que el Ayuntamiento nos tenga en cuenta. Solo pedimos eso”, concluye Silgueiro. La asociación se perfila como un referente para garantizar el derecho de todas las personas a disfrutar de un entorno accesible y equitativo.