El proyecto PLAZES.24, impulsado por la Diputación de Sevilla, ha comenzado a dejar su huella en Mairena del Aljarafe, con la intervención de
Osier Luther en dos casetas ubicadas en la Avenida Magdalena Sofía de Barat y en la Barriada Ciudad del Aljarafe. Este ambicioso proyecto busca llevar el arte mural a espacios públicos de la provincia, y Luther, artista local, ha sido el elegido para reflejar la evolución de la economía agrícola a la vida urbana moderna de su municipio natal.
En una entrevista con el propio Osier Luther, el artista nos habló de su experiencia en el proyecto, su visión sobre la obra y la importancia de tener el apoyo de su pueblo en este tipo de iniciativas.
¿Cómo llegaste a formar parte del proyecto PLAZES.24?
Soy artista de galería y trabajo con Delimbo en Sevilla. Laura y Seleka, quienes son los comisarios de esta galería, también desempeñan este rol en el proyecto PLAZES.24. Fue Seleka quien me seleccionó y, debido a ese vínculo profesional, consideró que yo era el artista adecuado para realizar este trabajo.
¿Cuánto tiempo te ha llevado llevar a cabo este mural?
Estuve unas cuatro semanas pintándolo, pero en total nos ha llevado varios meses debido a la preparación de toda la parte burocrática y el diseño. Lo más fácil ha sido hacer la obra, lo más complicado ha sido todo lo demás.
¿Puedes contarnos más sobre la estructura de los murales?
Son dos murales en dos casetillas, y cada casetilla tiene pintadas dos caras en el sentido del tráfico. El concepto es muy sencillo. La propuesta consiste en dos murales separados, pero conectados por un tema común: la evolución del estilo de vida y la economía local. Un mural representa la antigua economía rural con elementos agrícolas como tractores y granjeros, mientras que el otro muestra la transición hacia una vida urbana, destacando la infraestructura moderna, como coches y edificios.
¿Qué te inspiró para elegir este tema para los murales?
Básicamente, el proyecto PLAZES pretende que los artistas desarrollemos nuestra obra en el pueblo del que pertenecemos. Yo soy de Mairena y conozco la historia y la evolución de Mairena. Quería reflejar algo que he experimentado yo, que en unos años todo ha pasado de un campo de olivos a una pequeña ciudad.
¿Cómo ha sido la reacción de los vecinos y la comunidad ante tu intervención?
La experiencia ha sido muy bonita, ha tenido muy buena acogida por los vecinos. Siento que le he dado alegría y vida al espacio en el que he intervenido. Mi estilo es muy colorido, y en una zona de bloques de pisos, bastante monocrómica, el toque de color que le he dado ha gustado mucho. La gente se ha acercado a felicitarme y agradecerme mi trabajo. Agradar a mis vecinos es muy reconfortante para mí.
¿Qué significa para ti haber sido parte de este proyecto y tener el apoyo de tu pueblo?
Es un orgullo, por supuesto. Llevo desde los 15 años pintando murales, en el colegio para mí era una ilusión hacerlo, y ahora ha sido realmente ilusionante. Es un proyecto muy interesante. Estoy súper agradecido. Las instituciones públicas se han involucrado mucho. El proyecto está impulsado desde la Diputación, y el Ayuntamiento nos ha ayudado mucho. La idea es acercar la cultura al pueblo, dar ese toque artístico a la localidad. Me parece interesante que esté un artista local, del pueblo, impulsando su carrera y trayendo su obra al pueblo. Las instituciones, como el concejal de Cultura, se han involucrado mucho. Han estado pendientes de qué y cómo se iba a hacer. Para mí como artista, tener ese apoyo de mi pueblo ha sido muy importante.
¿Cómo te sientes al ver tu obra en el espacio público de tu comunidad?
Es un orgullo muy grande, ya que es algo que he estado esperando desde que era un niño. Llevo pintando desde los 15 años y, ahora, con la oportunidad de plasmar mi arte en el espacio público de mi pueblo, siento que he logrado algo especial. Lo mejor de todo ha sido la conexión con la gente y el apoyo de la comunidad. Ha sido un proceso muy gratificante.