El tiempo en: Aljarafe
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Tardes en el Lagartijo

Antorchas de ilusión y esperanza

Es el cariño por una tradición que, poco a poco, fue ganando adeptos hasta que cada jienense fue haciéndola suya y portándola allí donde fuera.

Publicidad Ai
  • Carrera Urbana Internacional Noche de San Antón.

Una ciudad que se une para celebrar y animar. Vecinos y vecinas que salen a sus puertas o buscan tramos del recorrido en torno a los que agolparse para, ilusionados, portar en sus manos unas antorchas que darán calor a unos corredores a los que animarán con gran ímpetu y brindarán enorme apoyo, aunque nos los conozcan de nada.

Es el cariño por una tradición que, poco a poco, fue ganando adeptos hasta que cada jienense fue haciéndola suya y portándola allí donde fuera.

La farolas, prácticamente, podrán apagarse y el silencio de la noche quedará sustituido por las rítmicas zancadas de los corredores a las que se unirán los coros de aquellos que se reúnan en torno al trazado de una de las pruebas más reconocidas del territorio nacional.

Una cita subrayada por muchos en toda España, pues la gran mayoría de atletas españoles desean vivir, al menos una vez, esta experiencia singular.

Más de 10.000 almas tomarán la salida mañana. Más de 10.000 historias distintas y únicas. Para algunos será una ocasión especial en lo referido a las características de la San Antón, por su público y sus antorchas, pero en lo relativo al reto físico será una prueba más o, para los más en forma, hasta un entrenamiento.

Otros tomarán la salida para disfrutar de esta festividad deportiva, formando parte de la celebración de Jaén, para después acudir a esas lumbres en las que pasar una agradable noche casi en familia.

Sin embargo, habrá muchos para los que la de este sábado será una noche que, difícilmente, podrán llegar a olvidar. Los que se marcaron un reto, hicieron una promesa o quieren demostrarse a sí mismos aquello de lo que son capaces de llegar a hacer superando la adversidad. Bien sea por una pérdida o por una bendición, consigo mismos firmaron un contrato por el cual no solo tomarían la salida, sino que lograrían cruzar la meta. La culminación a un proceso de preparación que les llevará a sentir un especial nerviosismo en los momentos previos.

Para ellos, el aliento de los jienenses que les rodearán y calor de las antorchas conformarán un fuego de esperanza que les abrigará a lo largo del recorrido, siendo también un impulso cuando el camino se ponga cuesta arriba.

Y en ese momento, cuando logren completar la última subida, subir ese último escalón, observarán el camino recorrido y sentirán que al correr la San Antón han promovido el fuego de su propia lumbre, quemando el  antiguo lastre para avanzar en un futuro con el cielo abierto.

A ellos, todo el ánimo del mundo. Mucha fuerza para esta cita tan especial.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN