Un médico ha denunciado recibir amenazas de muerte por parte de un paciente este pasado sábado en un centro sanitario de San Juan de Aznalfarache (Sevilla), al no atender el sanitario la petición de recetar benzodiacepinas.
Así lo relata en una nota el Sindicato Médico Andaluz (SMA), que ha indicado que el supuesto agresor habría instado al facultativo a que le recetara lorazepam y clonazepam, benzodiacepinas relacionadas con la fabricación del 'Karkubi', también conocida como 'droga de los pobres' o 'ampolla roja', entre otros sobrenombres, y cuyo ingrediente principal es el medicamento 'Rivotril'.
El objetivo de los que buscan hacerse con este medicamento, ha precisado el SMA, "no es otro que la fabricación de esta sustancia psicoactiva que se mueve en el mercado negro y que está generando un impacto negativo en la seguridad pública, la salud y la violencia en los entornos médicos".
Ante la negativa del médico a la petición, el agresor se habría abalanzado contra él con intención de agredirle o, al menos, escupirle, profiriendo numerosos insultos como "maricón de mierda" y amenazando con darle un paliza en la calle "porque se tiene que morir".
Tanto los insultos como las amenazas de muerte fueron escuchadas por los pacientes que esperaban en la sala de espera, cursando el médico la correspondiente denuncia ante las autoridades y planteándose desde el centro sanitario hacer una denuncia conjunta ante las reiteradas agresiones, ha trasladado el sindicato.
Y es que, "lamentablemente", ha continuado, "no es la primera vez que un facultativo de este centro de San Juan de Aznalfarache tiene que vivir una situación de peligro, poniendo aún más en evidencia si cabe la falta de seguridad que se vive en los centros de salud de la provincia de Sevilla".
"Ante esta constante situación de peligro e indefensión de los médicos, desde el Sindicato Médico de Sevilla exigimos una vez más que se tome medidas por parte de las autoridades sanitarias, implementando de una vez por todas medidas de seguridad efectivas y reales en todos los centros de salud, con sanciones efectivas que disuadan a los potenciales agresores de ejercer violencia alguna contra los profesionales sanitarios", han reivindicado.