El grupo de trabajo impulsado en torno al monasterio de San Isidoro del Campo, en Santiponce, ha celebrado recientemente una reunión en la que ha vuelto a denunciar el notable retraso que acumula la contratación de las obras de consolidación anunciadas desde 2021 por la Junta de Andalucía. Dichas actuaciones afectan a la antigua almazara, las naves del pósito y del almacén, las naves sur y este del claustro de los jerónimos y la torre, espacios que presentan un avanzado deterioro.
En el acta de dicha reunión se alerta de forma especial sobre “la situación crítica” en la que se encuentran actualmente la sala capitular y la sacristía, cuyas cubiertas presentan filtraciones que están provocando humedades. Estas patologías están dañando la decoración pictórica, con algunos deterioros casi irreparables, y comprometiendo incluso la estabilidad estructural de los muros y techumbres, lo que ha llevado a reclamar una intervención urgente por parte de la Consejería de Cultura.
Pese a las reiteradas consultas mensuales a la delegada territorial, Carmen Ortiz, los participantes aseguran que no han obtenido respuestas claras sobre el estado del procedimiento. La delegada, además, fue invitada a la reunión pero no acudió, lo que ha intensificado la preocupación del grupo. Ante ello, se ha acordado solicitar formalmente la designación de un interlocutor técnico que pueda informar con claridad sobre el avance real de las actuaciones.
Entre las decisiones adoptadas por la mesa figura la reiteración de una reclamación pendiente desde hace tiempo: la creación de una comisión de seguimiento con participación de la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Santiponce y entidades defensoras del patrimonio. Asimismo, se ha resuelto trasladar el caso al Defensor del Pueblo Andaluz y, si no se produce respuesta en un plazo razonable, llevarlo también ante el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno de la Junta.
En paralelo, el pleno del Ayuntamiento de Santiponce ha aprobado por unanimidad una propuesta de Andalucía por Sí para exigir al Gobierno andaluz que agilice la contratación de las obras comprometidas desde hace más de tres años y medio. El consistorio, gobernado por IU junto al PP y la exalcaldesa socialista, ya había aprobado anteriormente una moción similar, instando a la Junta a actuar frente al “retraso” en unas obras financiadas con fondos europeos y valoradas en 4,7 millones de euros.
San Isidoro del Campo, fundado en 1301 y declarado Bien de Interés Cultural, se divide entre una zona gestionada por la Junta y otra cedida en uso por la Fundación Casa Álvarez de Toledo y Mencos. No obstante, los colectivos culturales locales insisten en que el 80 % del monasterio es propiedad autonómica y que esta parte, aún sin restaurar, presenta daños estructurales graves que requieren medidas urgentes para preservar este enclave único del gótico y el mudéjar sevillano.
