La ópera El elixir de amor de G. Donizetti, uno de los títulos más populares del repertorio, se pondrá en escena los días 20, 22 y 24 de enero en el Teatro Villamarta. Esta producción del coliseo jerezano resalta los aspectos mágicos del discurso musical de su autor, que se muestran en una peculiar visión de la vida y los valores humanos. La soprano Ainhoa Garmendia y el tenor Ismael Jordi encabezan el reparto artístico.
“Hemos tratado de destacar en esta producción esos valores planteados por Donizetti”, afirmó Francisco López, director de escena. Entre ellos, destacó “el ingenuismo, la capacidad de fabulación, la ilusión, el amor”. En definitiva, que “la vida está llena de cosas que emocionan y algunas de ellas parece que las hemos perdido”, añadió. A este respecto, los personajes “parecen un poco muñecotes” y, sobre el escenario, ciertos elementos contribuyen a crear esa sensación de “teatrito” mientras el paisaje rural subraya “lo idílico”.
El máximo responsable escénico indicó que El elixir de amor tiene la virtud de hacer creer al espectador que “es posible cambiar la vida, generar ilusión, que no tontería”. Todo ello bajo el paraguas de una trama argumental en la que el triángulo amoroso planteado desemboca en un final feliz.
No obstante, en este nuevo acercamiento a este título de Donizetti se producen también “guiños que nos acercan a la realidad”. El primero de ellos es de carácter local, puesto que se vincula 'el líquido milagroso' con la ciudad de Jerez. El segundo está relacionado con la credibilidad de la palabra y su capacidad de convencer. Así, se presenta el personaje de Dulcamara como “un gran publicista y comunicador” con técnicas más actuales de persuasión.
La soprano Ainhoa Garmendia debuta en el coliseo jerezano con el papel de Adina en sustitución de Ainhoa Arteta, que ha cancelado su actuación por enfermedad. “Va a ser una sorpresa importante”, profetizó Francisco López sobre la calidad de esta cantante. Por su parte, Garmendia explicó que encarna a “una mujer práctica” frente a la ingenuidad de Nemorino.
Obra preferida
Este Nemorino no es otro que Ismael Jordi, que hace unos días compartía escenario con Plácido Domingo en Valencia en Iphigénie en Tuaride' de Gluck. El elixir de amor es “mi obra preferida”, aseguró el tenor, que recordó que el aria Una furtiva lágrima -seña de identidad de esta ópera- fue la primera que cantó durante sus estudios con Kraus. “Es un aria que me ha abierto puertas”, dijo.
El bajo-barítono Stefano de Peppo asumirá el rol de Dulcamara, mientras que el barítono Rodrigo Esteves hará de Belcore y la soprano Leticia Rodríguez interpretará a Giannetta. Actrices y actores como Isabel Ávila, Carmen Aceituno, Luichi Macías, Javier Carmona, Rafael Tubío y Benito Cordero completan el reparto artístico.
Gianluca Martinenghi dirigirá desde el foso a la Orquesta Filarmónica de Málaga. El maestro italiano ha buscado “la estilización orquestal” a la hora de abordar la lectura de la partitura. “Me gusta un Donizetti más ligero y volátil”, comentó. Además, pretende poner en valor páginas menos conocidas de esta ópera como “el final del primer acto y el concertante final”.
La escenografía y vestuario llevan la firma de Jesús Ruiz en un Elixir de amor que “llega directamente al corazón, no a la cabeza”, según el responsable escénico de esta producción. “Es una música que logra conmovernos en más de diez ocasiones”, apuntó.
La ópera El elixir de amor de G. Donizetti fue estrenada en el Teatro de la Canobbiana de Milán el 12 de mayo de 1832. El libreto, cuyo autor es Felice Romani, está basado en la obra El filtro de Eugène Scribe. La obra, ambientada en un pueblo italiano de principios del siglo XIX, narra el amor de Nemorino por la bella y coqueta Adina, a quien también hacer la corte el sargento Belcore. Para aplacar sus penas, Nemorino compra un filtro de amor, al curandero Dulcamara. Cuando Adina descubre que Nemorino se ha alistado como soldado con tal de poder costearse el elixir, emocionada, reconoce la pasión de su pretendiente y compra su libertad.