La noche madrileña del miércoles se inundó de chispeantes burbujas y brilló con deslumbrantes joyas. Una serie de nuestras celebrities se repartieron entre la fiesta de Uno de 50 y la de Moët&Chandon, pero eso sí, glamour no faltó en ninguna parte. ¿Quieres verlo?
Las grandes adictas a la joyas compitieron en estilo con las amantes del buen champán. Así, por un lado vimos a Eva González y Laura Sánchez derrochando belleza en la presentación de la nueva colección de Uno de 50, mientras Carmen Lomana lucía palmito en el Palacio de Cibeles de Madrid disfrutando de la fiesta de Moët&Chandon.
La novia de Cayetano Rivera Ordóñez posó radiante con un vestido blanco asimétrico y enormes tacones nude, mientras que la otra modelo andaluza se decantó por un mono short negro que contrastó con una blazer de estampado felino y sandalias de tacón muy étnicas.
Por su parte, Carmen Lomana fue de las que también apostó por el blanco para un vestido con escote joya y sandalias de tiras plateadas. Especial mención merece su bolso verde pistacho con alegres bordados de coloridas mariposas. Otras adictas al color impoluto fueron José Toledo y Arancha del Sol.
Nuria March puso la guinda a la noche luciendo un precioso diseño en tono champán, para hacer honor a la fiesta que Moët&Chandon organizaba esa noche. Sus complementos, salones nude y mini bolso dorado. Marta Robles se decantó por la tendencia black&white de aires masculinos y María José Suárez prefirió un minivestido que jugaba con tonos grises y negros.
MARÍA LEÓN Y TAMARA FALCÓ INUNDAN DE COLOR LA NOCHE MADRILEÑA
Los tonos alegres y vivos del verano llegaron de la mano de María León y su fantástico vestido en amarillo flúor complementado con bolso de mano fucsia; y de Tamara Falcó, quien lució un traje midi que jugaba con las transparencias y los plisados en rojo ácido y firmado por Christian Dior.
Mónica Hoyos recurrió al aguamarina, uno de los colores de la temporada, y Ana Rodríguez nos volvió a sorprender con su look juvenil y fresco en forma de traje asimétrico con estampado en vivos amarillos y azules.
Finalmente, el patinazo de la noche llegó con la aparición de Alba Flores en la fiesta de Uno de 50, quien eligió un vestido largo de aires hippies con fondo nude sobre el que se dibujaban franjas horizontales negras, dando sensación de desteñido. El caso es que el outfit no destacaba mucho sobre su pálida tez, algo que no le favorecía en absoluto.
