El representante de la consultora Vitalia Antonio Albarracín ha asegurado hoy en la comisión de los ERE que la empresa desconocía la inclusión de "intrusos" en los expedientes y que las elevadas comisiones no las percibió la compañía, sino que se pagaron a la agencia aseguradora que emitía las pólizas.
Albarracín, que no ha respondido a los grupos parlamentarios de la Cámara andaluza acogiéndose a su derecho a no declarar, ha dicho en su alegato final que quien percibió las comisiones no fue Vitalia, sino que fue "el agente de seguros exclusivo de la agencia aseguradora que finalmente emitió las pólizas del ERE".
Ha aclarado que no es un responsable nacional de la empresa, sino un abogado por cuenta ajena contratado, y que no conocía a las empresas que formulaban el ERE ni a las aseguradoras, "salvo alguna rara excepción".
Además, ha indicado que Vitalia "se ha limitado a realizar su trabajo habitual" y para el que se le contrató, que era "formalizar las pólizas que les encargaban los pagadores" de forma que daban por hecho que si se las pedían "estaban legitimados para ello" y ha añadido que "ni las empresas ni la Junta pueden alegar desconocimiento de lo afectados".
En este sentido, ha afirmado que las aseguradoras le han confirmado que los pagos se hacían a otra empresa distinta a Vialia que actuaba como agente y que, al no existir límites de comisión al respecto "y al ser legal", se efectuaban.
"Quien paga es la aseguradora porque veía que todo era legal", ha añadido Albarracín, quien ha incidido en que Vitalia, como consultora de previsión social, "tan solo cobraba por los servicios que presta".
Ha manifestado que son los responsables de la Junta y de las empresas los que conocen los detalles del ERE y tienen que advertir de la existencia de irregularidades, ya que Vitalia "no interviene en el proceso ni en la toma decisiones", además de que él no tuvo "ninguna relación con los gabinetes jurídicos que participaron".
Ha indicado que Vitalia en la solicitud de ayudas "no tiene ningún trabajo que realizar" y que sus servicios se solicitan por primera vez cuando la empresa se dirige a ellos para hacer los estudios pertinentes, pero que "la inclusión de intrusos en ningún caso beneficia a la consultora".
Albarracín ha asegurado que él trabajaba en Madrid y que no tenía "ni un triste poder notarial para poder firmar un contrato en nombre de la empresa", además de que las negociaciones con Andalucía se enviaban directamente a Barcelona desde la oficina de Sevilla.
Ha explicado que la empresa le encargó que controlase los pagos y que su labor era la del "simple reenvío" de lo recibido a la Junta para comprobar su aprobación, ya que no tiene elementos de juicio "para comprobar la idoneidad de las personas" incluidas en el ERE.
Respecto a las reuniones con los directores generales de Trabajo, ha señalado que la Junta "incumplía sistemáticamente el calendario de pagos" y por ello iba aproximadamente cada dos meses a Sevilla, para solicitar que se pusieran al corriente en reuniones, que en ocasiones se convertían "en comidas de trabajo".
El portavoz del PP en la comisión, Rafael Carmona, ha destacado la importancia que habría tenido su declaración para "desentramar la situación" y le ha preguntado por qué se pagaban unas comisiones tan altas y quién requería los servicios de Vitalia.
Además, le ha preguntado cómo un representante de una empresa que ofrece servicios a la administración entregaba "sobres con dinero" al chófer del exdirector de Trabajo Francisco Javier Guerrero, y si ese dinero era para algún alto cargo del PSOE.
Por su parte, la diputada de IU Alba Doblas ha dicho que "el silencio puede ser interpretado como que hay algo que ocultar" y ha incidido en las causas y las cuantías de las comisiones pagadas.
"La mayoría de los intrusos lo son en las pólizas en la que interviene Vitalia", ha añadido Doblas, quien cree que es "imposible" que no supieran lo que ocurría y que no cobraran por esa gestión de los ERE.
La diputada del PSOE Antonia Moro ha manifestado su respeto a la decisión de no declarar de Albarracín y ha entregado a la dirección de la comisión un listado con 27 preguntas para que conste en acta.
Antonio Albarracín ha abierto las nuevas sesiones de la comisión parlamentaria de investigación que se celebrarán durante cuatro días -20, 21, 24 y 25 de septiembre-, y en las que van a comparecer una decena de personas.