La entidad estadounidense Bank of America Merrill Lynch ha mejorado en tres décimas su previsión de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de España para 2015, desde el 1,5% al 1,8%, debido al impacto positivo que tendrá la reforma fiscal en la economía española.
"La base de esta mejora es la recientemente anunciada reforma fiscal, que aportará un pequeño impulso al crecimiento, pero a costa de un empeoramiento de los datos fiscales", señala la entidad en su informe semanal sobre la eurozona.
De hecho, los analistas de Bank of America prevén que el déficit público cierre 2013 en el 5,5% del PIB, lo que supone 1,3 puntos porcentuales más que el 4,2% acordado por el Gobierno español con Bruselas.
Respecto a 2014, la entidad mantiene que España crecerá un 1,2%, previsión que duplicó el pasado mes de junio, y, en concreto, prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) aumente cinco décimas en el segundo trimestre y cuatro décimas de media los seis siguientes.
Por otro lado, destaca que la inflación seguirá contenida en un contexto de ajuste "relativamente fuerte" de los precios, de evolución "muy contenida" de los salarios y de pequeña mejora de los márgenes. Así, prevé que la inflación armonizada se sitúe en apenas el 0,2% este año y el 0,6% en 2015.
Respecto a su preocupaciones a medio plazo, añade que continúan siendo la fragmentación política, que podría perjudicar las reformas y las medidas de austeridad tras las elecciones de 2015, así como el ajuste fiscal y la dinámica de la deuda, particularmente en el contexto de una muy baja inflación y riesgos de deflación".
Por otra parte, Bank of America informa de que ha revisado una décima a la baja su previsión de crecimiento de la eurozona tanto para 2014 como para 2015, hasta el 1% y el 1,5%, respectivamente. Esto refleja unos datos "ligeramente peor de los esperados" en el segundo trimestre y la falta de cambios en la tendencia.
Por países, ha rebajado la previsión de Alemania desde el 1,9% al 1,8% para 2014 y desde el 2,1% al 1,9% la de 2015, mientras que en el caso de Francia espera que crezca un 0,5% este año un 1,3% el próximo, frente a su anterior previsión del 0,7% y el 1,4%, respectivamente. En el caso de Italia, ha recortado la estimación para 2014 desde el 0,5% al 0,3%.