La Hermandad Matriz forma a bordadores
Los alumnos terminarán de bordar una saya para la Virgen del Rocío el próximo año
El taller de Artesanía Santa Bárbara, de Sevilla es el elegido para dar forma al nuevo Simpecado de la hermandad Matriz de Almonte. El estado de deterioro del antiguo emblema almonteño aconsejaba su definitiva conservación como pieza de museo. El nuevo será una fiel reproducción del original.
El Simpecado de la Hermandad Matriz data de finales del siglo XVIII y es de estilo neobarroco sobre fina maya de plata con la imagen de la Virgen bordada, con media luna y escudo de armas de Almonte y Heraldo de los Guzmán y Los Zúñiga.
Tras el desgate producido de dicho simpecado, los brillos han pasado a ser un color cenizo. El paso de los años -es del año 1724- lo había convertido casi en una reliquia del mundo rociero.
Tal vez lo más complicado para los bordadores a la hora de plasmar esta réplica ha sido la "reconstrucción del dibujo" original, ya que el Simpecado actual "tenía muchos añadidos, y piezas superpuestas. Muy laboriosa también ha sido la reconstrucción del óvalo de la Santísima Virgen, en la que aparece con la saya de los Montpensier y la ráfaga de rocalla de puntas.
El bordado está enriquecido con abundante pedrería, denominada talcos, los cuales perfilan algunos motivos como la orla de Virgen, además de formar una especie de rosetas o espigas de trigo en diversos tramos del Simpecado.
El estreno y bendición de esta fastuosa obra se producirá durante la función principal que pone fin a la novena de la Virgen en la parroquia de la Asunción de Almonte
Pero la segunda parte de todo este trabajo lo están llevando a cabo en las dependencias de la hermandad matriz, en la que un grupo de devotos anónimos se reúnen dos tardes a la semana, para bordar, quizás el trabajo que están llevando a cabo no sea tan trascendental como el bordado en sí del simpecado, pero con labores como ésta se puede decir que es una gran labor.
Se repite el nombre de Talleres Santa Bárbara, y es que son dos los maestros que se alternan con estos alumnos, que llevan dos años en el aula, alguno de ellos bien parecen profesores en vez de alumnos por la destreza con la aguja. Se espera que para el año que viene puedan culminar la labor que esta haciendo, que finalmente será para una nueva saya de la Virgen del Rocío.
Además junto a ellos, hay otro taller éste es de modelado, también promovido por la Hermandad Matriz de Almonte, de momento aprendizaje, base que bien podría ser una gran escuela como es hoy día la de los tamborileros, conocida por `medio mundo´.
El Simpecado de la Hermandad Matriz data de finales del siglo XVIII y es de estilo neobarroco sobre fina maya de plata con la imagen de la Virgen bordada, con media luna y escudo de armas de Almonte y Heraldo de los Guzmán y Los Zúñiga.
Tras el desgate producido de dicho simpecado, los brillos han pasado a ser un color cenizo. El paso de los años -es del año 1724- lo había convertido casi en una reliquia del mundo rociero.
Tal vez lo más complicado para los bordadores a la hora de plasmar esta réplica ha sido la "reconstrucción del dibujo" original, ya que el Simpecado actual "tenía muchos añadidos, y piezas superpuestas. Muy laboriosa también ha sido la reconstrucción del óvalo de la Santísima Virgen, en la que aparece con la saya de los Montpensier y la ráfaga de rocalla de puntas.
El bordado está enriquecido con abundante pedrería, denominada talcos, los cuales perfilan algunos motivos como la orla de Virgen, además de formar una especie de rosetas o espigas de trigo en diversos tramos del Simpecado.
El estreno y bendición de esta fastuosa obra se producirá durante la función principal que pone fin a la novena de la Virgen en la parroquia de la Asunción de Almonte
Pero la segunda parte de todo este trabajo lo están llevando a cabo en las dependencias de la hermandad matriz, en la que un grupo de devotos anónimos se reúnen dos tardes a la semana, para bordar, quizás el trabajo que están llevando a cabo no sea tan trascendental como el bordado en sí del simpecado, pero con labores como ésta se puede decir que es una gran labor.
Se repite el nombre de Talleres Santa Bárbara, y es que son dos los maestros que se alternan con estos alumnos, que llevan dos años en el aula, alguno de ellos bien parecen profesores en vez de alumnos por la destreza con la aguja. Se espera que para el año que viene puedan culminar la labor que esta haciendo, que finalmente será para una nueva saya de la Virgen del Rocío.
Además junto a ellos, hay otro taller éste es de modelado, también promovido por la Hermandad Matriz de Almonte, de momento aprendizaje, base que bien podría ser una gran escuela como es hoy día la de los tamborileros, conocida por `medio mundo´.
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