Susana Díaz optó el sábado y también ayer domingo por aislarse del chaparrón de críticas que sobre la gestora del PSOE, y de forma velada sobre ella, vertió Pedro Sánchez en Dos Hermanas durante el acto en el que anunció su postulación para recuperar el timón de Ferraz. El silencio ha durado poco porque hoy ha estallado su mano derecha en la sede andaluza de San Vicente, Juan Cornejo. El secretario de Organización del PSOE-A ha advertido en voz alta que "ya está bien de demagogias y de falacias", en relación a las píldoras que el exsecretario general fue dejando a su paso hace sólo dos días por Sevilla.

Cornejo se aferró apenas unos instantes al discurso oficial, el repetido por la presidenta andaluza durante todo el fin de semana y que habla de "respetar el paso que quiera dar cada compañero" en el intento de liderar el partido. "Están en su derecho", alegó en referencia a Pedro Sánchez y a Patxi López, a la espera ambos de que Susana Díaz decida si da o no el paso definitivo. Eso sí, lo que el PSOE andaluz no acepta es que en los discursos que se van desgranando "se engañe a la militancia".

"Hay que ser honestos y contar las cosas como son", ha reclamado Cornejo. Se refería, por ejemplo, al ataque que lanzó Pedro Sánchez en Dos Hermanas sobre la posición que adoptó la gestora socialista que dirige Javier Fernández en la abstención en la investidura de Mariano Rajoy. Frente a esa acusación de "reconoced que os equivocasteis" que dirigió el exsecretario general a Ferraz, Cornejo ha replicado que esa teoría es simplemente "mentira" y que no tiene sentido "abrir un debate ya cerrado". "Lo decidió el Comité Federal, no la gestora, en una votación. ¿Por qué quieren confundir a los ciudadanos?", ha protestado.

Una frase ha resumido el parecer de la oficialidad sobre la indisimulada intención de Pedro Sánchez de arrogarse la bandera de la militancia: "Hay quien se mira al espejo y se cree que el más guapo", ha ironizado. Es más, el PSOE andaluz contraataca recordando a Sánchez que si tan partidario es ahora de entregar todo el poder de decisión a la militancia por qué sometió a votación el pacto de investidura suscrito en su día con Ciudadanos una vez firmado con Albert Rivera "y no antes". "¿Por qué no se consultó también a la militancia sobre la abstención ante la investidura? La misma dirección que convocó un congreso exprés, que luego fue tumbado, podría haberlo hecho", asegura Cornejo, molesto también por la teoría de Sánchez, alimentada por sus partidarios, de que la gestora estaría maquinando para fulminar el proceso de primarias en la elección del nuevo secretario general, algo "imposible" porque así lo recogen los estatutos internos. "No se engañe más a la militancia, que va a votar seguro en primarias".

La dirección de San Vicente también protesta por lo que considera riesgo de embarrar el debate y enfrentar a los militantes cuando aún restan tres largos meses para la convocatoria a finales de abril de un Congreso Federal que no se celebrará hasta mediados de junio. Y antes de eso, habrá que ir a primarias. Cornejo ha reivindicado "un PSOE unido", como ha hecho durante todo el fin de semana Susana Díaz eludiendo el cuerpo a cuerpo anticipado con Sánchez, "para solucionar los problemas de los ciudadanos y no perderse en temas que desvíen la atención". 

¿Presiona Sánchez a Susana Díaz para que dé ya el paso? Ahí aflora la versión oficial, repetida una y mil veces en los últimos meses desde la caída en octubre de Sánchez: "Es una decisión que depende sólo de ella, es un tema personal".