Los panaderos artesanos de Alcalá de Guadaíra, en Sevilla, han constituido una asociación con la que pretenden incentivar el consumo de su producto, especialmente entre los más jóvenes, frente a la competencia del pan industrial.
A través de la entidad, imparten talleres en colegios para enseñar cómo se elabora el pan de siempre y mostrar sus efectos positivos para la salud.
La tradición panadera de la localidad se remonta a la Edad Media. En el siglo XX continuó siendo un sector económico de primer orden en la ciudad. Sin embargo, hoy solo quedan 15 obradores.