El cocodrilo más grande de Europa vive en el Parque de Cocodrilos de Torremolinos (Crocodile Park). Mide cinco metros de largo y pesa unos 600 kilogramos. Se le conoce como Big Daddy, y familiarmente, como Paco.
El Parque de Cocodrilos de Torremolinos tiene una extensión de 16.000 metros cuadrados y su construcción semeja a las antiguas fortalezas africanas de los siglos VII al IX. Alberga más de 200 cocodrilos de todas las edades y tamaños, así como tortugas. La mayoría de los cocodrilos fueron traídos de Sudáfrica y Namibia. El Parque abrió sus puertas en el 2003, aunque anteriormente funcionaba en Cártama desde 1997.
La contemplación de los cocodrilos es especialmente llamativa para los niños, que pueden hacerse fotos con una cría de tan extraordinario reptil, considerado como el más antiguo del mundo. Los expertos aseguran que era contemporáneo de los dinosaurios. Los cocodrilos tienen una vida de entre 50 y 80 años, aunque hay ejemplares que han pasado de los 100 años. Por lo general habitan en las regiones tropicales, junto a ríos y lagos. Se alimentan principalmente de vertebrados: peces, reptiles y mamíferos, sin importar el tamaño de los mismos. No precisan comer todos los días. Algunos pueden estar sin comer ni beber durante dos años.
El cocodrilo del Nilo llega a medir 6 metros y alcanza un peso cercano a los 750 kgs. El cocodrilo marino es más largo y pesado. En 1957 se capturó en Queensland, Australia, un ejemplar que medía 8,5 metros y pesaba 1.700 kgs. En tierra, un cocodrilo puede desplazarse a 16 km por hora. En el agua llega a alcanzar una velocidad de 45 km/hora.
Los cocodrilos, que incluyen caimanes, aligátores y gaviales, mudan lentamente su piel, recubierta de escamas de queratina. De ahí que no se aprecie el cambio a simple vista. En su piel se observan anillos de crecimiento anual, como en los árboles, y por eso resulta fácil calcular su edad contando los anillos.
Los ejemplares que habitan el parque de Cocodrilos de Torremolinos son alimentados y cuidados a diario. No obstante sus cuidadores extreman todas las precauciones al estar con ellos, pues son animales que no conocen a quienes les dan de comer y pueden revolverse al menor descuido.
Dotado de las máximas medidas de seguridad, el parque incluye un museo africano y sala de proyecciones donde se da a conocer en toda su extensión la historia, biología y hábitat de tan voraces reptiles.
