Se habla de un viejo, de un niño o de si,
pero mi historia es difícil,
no voy a hablaros de un hombre común.
Haré la historia de un ser de otro mundo,
de un animal de galaxia.
Es una historia que tiene que ver
con el curso de la Vía Láctea
Nacido de una tormenta en el sol de una noche, el 29 del penúltimo mes de 1946. En una casa del barrio de la Loma, en san Antonio de Baños o San Antonio del humor. A si se conoce a esta ciudad, por sus tradicionales revistas humorísticas. Situada al sureste de la isla caribeña llamada la perla del Caribe.
Este niño fue engrandeciendo su infancia de sueños y fantasías. Soñando un “ unicornio azul “cargado de “ barredores de tristezas” y de “ reparadores de sueños “, de“ rabos de nubes “ y de “ alas de colibrí “, de “ pintores de mujeres-soles “ y de “locuras que son como brazos de mar “.
Este pequeño fue dormido desde la cuna por su madre con canciones de Trova, se bañaba con danzones, esta mujer barría con boleros y cocinaba con sones. Su abuela lo dormía también con canciones radiofónicas o anteriores al medio, improvisaba unas rumbas en el armario frente a su cuna.
Como muchas otras voces populares aprendió a cantar casi antes que a hablar imitando los sonidos de la radio y de su propia madre. En una ciudad con abundante tradición en el campo de las revistas humorísticas, nuestro joven artista hará sus propias viñetas.
A partir de 1958 en distintas regiones de la isla caribeña, se produjeron sustanciosos cambios.
En los cuales nuestro trovador de sueños quiso colaborar. Este se alisto a las brigadas de alfabetización o, lo que es lo mismo acercar la cultura a las gentes en las zonas rurales y enseñarles a leer y escribir. Como maestro realizara esta tarea en las montañas y en otras zonas remotas o de difícil acceso. Allí convivirá ayudando a los campesinos de día en sus labores y de noche les enseñara a leer y escribir, impartiéndoles historia y cultura de su país y del resto del mundo.
Tras esta experiencia empezó a colaborar en una revista humorística, dibujando historietas, que era una de sus grandes pasiones después de la música. Igual que la lectura otra gran pasión. Fue mamando el nutriente cultural de escritores como Neruda, Lorca, Allá Poe, Guillen o whitman. De pequeño había descubierto a otros autores de aventuras como Emilio Salgari, wat Scott, Julio Verne, Antoine de Saint-Exupery, etc...
Nuestro poeta solidario de espíritu aventurero embarcara en el barco de pesca “Playa Girón “, perteneciente a la flota de pesca caribeña. Formada esta a raíz del bloqueo sufrido por la isla por parte de otros países. La consigna era que la población se abasteciera de pescados, aparte de los recursos tradicionales. Durante esta travesía el improvisado marinero escribiría buena parte de sus canciones más populares.
A principio de los años 70, este cantor aventurero junto a otros cantautores caribeños formarán la “Nueva Trova”. En Plena actividad musical de la Trova, nuestro amigo aventurero quiso emular al guerrillero heroico. Alistándose en las brigadas internacionales con destino Angola, donde este país luchaba por su independencia. Allí realizo junto a otros compañeros de la Nueva Trova varias actividades culturales en el frente y en algunas ciudades.
Hoy en día nos sorprende este cantautor solidario, llevando la cultura por los barios marginales de su país y realizando conciertos en las cárceles, sin pedir nada a cambio.
Felicidades en el día de tus 70 y pocos años. Que la magia de tu poesía hecha canción nos siga aportando ese amor y esa rebeldía como un arma cargada de futuro, para enfrentarnos a los tiempos que nos han tocado vivir.
Yo no sé lo que es el destino,
Caminando fui lo que fui.
Allá Dios, que será divino,
Yo me muero como viví.
Silvio Rodríguez
