El presidente de la Diputación Provincial de Málaga, Salvador Pendón, aseguró ayer que la actitud de la oposición en el Ayuntamiento de Estepona es una clase de "gamberrismo institucional" y dijo que le parece "un poco grosero" que se dejen sus sueldos intactos.

Pendón respondió así en rueda de prensa al acuerdo de los grupos políticos de la oposición en el Consistorio de la localidad malagueña de suprimir las tasas de recogida de basura y del servicio de alcantarillado y de bajar los sueldos de los ediles del equipo de gobierno.

El presidente de la Diputación señaló que suprimir dichas tasas "puede ser ilegal" y que debe estar avalado por un estudio económico y se preguntó cómo reaccionarán los populares cuando se proponga la misma medida en los ayuntamientos donde gobiernan.

Por su parte, el portavoz del PP en la Diputación, Francisco Salado, pidió al alcalde de Estepona, David Valadez, "que se busque un buen abogado" porque el acuerdo "no tiene nada de prevaricación ni de vulneración de derechos fundamentales".

Recordó que los acuerdos de las administraciones públicas son ejecutivos y obligatorios desde que se adoptan y ha señalado que "lo que debe hacer el alcalde es cumplirlo y, si cree que no es legal, demostrarlo y pedir su revocación y anulación".

Por último, la portavoz de Izquierda Unida, Encarnación Páez, criticó que el PP "no tiene autoridad moral ninguna" para solicitar que el equipo de gobierno de Estepona se rebaje el sueldo "cuando ellos no lo hacen donde gobiernan".