Consistió en el ataque que hizo el general francés Vedel en su intento final de ayudar a las tropas del General Dupont. A pesar de que ya todo estaba perdido y que las tropas de Napoléon habían capitulado, el General Vedel bombardeó el Cerro de San Cristóbal, que fue lo que escenificaron las tropas en ese mismo lugar, en la mañana de un domingo que estuvo marcado por las elevadas temperaturas, pese a lo cual varios miles de bailenenses y visitantes acudieron al mencionado cerro para seguir en directo las evoluciones de dicho pasaje de la historia bailenense.
La edil de Juventud, María Torres, fue la encargada de narrar a través de la megafonía instalada en el recinto, este pasaje de la Batalla de Bailén.
Para ello, se contó con la participación de más de 200 soldados de artillería e infantería pertenecientes a grupos de recreación de Bailén, Jaén, Málaga, La Albuera, La Coruña, Móstoles y Canarias, cuya participación se ha querido agradecer de manera efusiva desde el Consistorio.
Además, se utilizaron tres cañones y unos cuarenta kilos de pólvora, lo que, unido al buen hacer de los recreadores, contribuyó a dotar la reconstrucción histórica de mayor realismo.
Para facilitar el acceso de aquellas personas que acudieron en coche al Cerro de San Cristóbal se habilitaron una serie de estacionamientos para vehículos en la carretera de Baños, a la altura del Barrio del Pilar, en la calle Pablo Iglesias y en los alrededores del Centro de Educación Infantil Historiador Jesús de Haro, entre otras.
La edil de Juventud, María Torres, fue la encargada de narrar a través de la megafonía instalada en el recinto, este pasaje de la Batalla de Bailén.
Para ello, se contó con la participación de más de 200 soldados de artillería e infantería pertenecientes a grupos de recreación de Bailén, Jaén, Málaga, La Albuera, La Coruña, Móstoles y Canarias, cuya participación se ha querido agradecer de manera efusiva desde el Consistorio.
Además, se utilizaron tres cañones y unos cuarenta kilos de pólvora, lo que, unido al buen hacer de los recreadores, contribuyó a dotar la reconstrucción histórica de mayor realismo.
Para facilitar el acceso de aquellas personas que acudieron en coche al Cerro de San Cristóbal se habilitaron una serie de estacionamientos para vehículos en la carretera de Baños, a la altura del Barrio del Pilar, en la calle Pablo Iglesias y en los alrededores del Centro de Educación Infantil Historiador Jesús de Haro, entre otras.
