Marzo ha comenzado en Arcos con 49 personas menos inscritas en los servicios públicos de empleo. El dato pasa de los 4.884 desempleados del mes de enero a los 4.835 del recién clausurado febrero. Por sexos, ha bajado el paro entre los varones (de 1.823 a 1.750), pero, como dato negativo, ha aumentado el desempleo en la población femenina (de 3.061 a 3.085 inscritas). En el caso de los hombres, tan sólo se registró un ligero empeoramiento del dato respecto a los menores de 25 años de edad, aunque en el caso de las mujeres subió el paro entre las menores de 25 y mayores de 45 años.
Por sectores laborales, felizmente bajó el desempleo en agricultura (de 377 a 352 parados), pero subió en industria (de 150 a 160). Aunque de forma leve, también se redujo la cifra de desempleados en la construcción (de 688 a 666), pero también bajó de forma más importante en el sector servicios (de 3.365 a 3.322 parados). Es por tanto este último sector el que presumiblemente ha tirado en esta ocasión del empleo, posiblemente ante la temporada turística que trae consigo la Semana Santa como hecho económico. No obstante, llegan noticias de la gran ocupación hotelera que ha disfrutado Arcos durante el fin de semana grande de las fiestas de carnaval, lo cual genera puestos de trabajo y actividad económica.
En sus primeras lecturas, la delegada municipal y diputada provincial de Empleo, Ana Carrera, se ha congratulado de la bajada del paro, pero ha dicho que “no es para tocar campanas”, ya que Arcos sufre una tasa de paro por encima del 30 por ciento, entre las primeras de la provincia. Carrera ha apelado a los gobiernos autonómico y nacional para que pongan sobre la mesa medidas que garanticen nuevos puestos de trabajo. De hecho, por ahora la Junta de Andalucía, gobernada por PP y Ciudadanos, no ha puesto en marcha los planes de empleo que la institución autonómica venía desarrollando durante los últimos años.
En clave local, la también delegada de Turismo en Arcos espera que la próxima Semana Santa que está a la vuelta de la esquina obre el milagro de crear más puestos de trabajo en la población dentro del sector servicios, pues los establecimientos necesitan mano de obra extraordinaria en muchos casos para cubrir la demanda propia de las fiestas.
A todo ello, cientos de arcenses siguen trabajando fuera de su tierra, fundamentalmente en zonas costeras como Mallorca.
